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Chile se prepara para una segunda vuelta presidencial con voto obligatorio, luego de que la primera ronda de las elecciones del 16 de noviembre de 2025 no arrojara un ganador por mayoría absoluta. Los ciudadanos deberán acudir nuevamente a las urnas el próximo 14 de diciembre para elegir al futuro mandatario, en un balotaje que enfrentará a Jeannette Jara, del Partido Comunista, y a José Antonio Kast, del Partido Republicano.
La reciente jornada electoral, que marcó la primera vez que el país implementó la inscripción automática y el voto obligatorio, vio a millones de chilenos cumplir con su deber cívico. La contienda por la presidencia se definió entre dos figuras prominentes del espectro político nacional, quienes ahora se medirán en una decisiva segunda vuelta.
En la primera vuelta, la candidata oficialista, Jeannette Jara, logró captar el 26,85% de las preferencias, consolidándose como la opción más votada. Por su parte, José Antonio Kast obtuvo el 23,92% de los sufragios, asegurando su paso a la siguiente fase. Estos resultados, al no superar ninguno de los candidatos el 50% más uno de los votos válidamente emitidos, activaron el mecanismo de la segunda vuelta, tal como lo estipula el sistema electoral chileno para garantizar la legitimidad del mandato presidencial.
La participación ciudadana en esta primera instancia fue significativa, dada la novedad del sistema de voto obligatorio. Los votantes no solo eligieron a su candidato presidencial, sino que también renovaron parte del Congreso, votando por diputados y, en algunas regiones, por senadores, configurando así el nuevo panorama político del país.
Una de las principales interrogantes que surgieron tras la primera vuelta fue si el carácter obligatorio del voto se mantendría para el balotaje. La respuesta es afirmativa: la segunda vuelta electoral, programada para el 14 de diciembre, mantendrá el carácter obligatorio del sufragio. Esto significa que todos los ciudadanos habilitados para votar deberán presentarse en sus respectivos locales de votación, tal como lo hicieron en noviembre.
Sin embargo, existe una diferencia fundamental entre ambas instancias. Mientras que en la primera vuelta los votantes debieron emitir su preferencia por múltiples cargos (presidente, diputados y, en algunos casos, senadores), en el balotaje el foco se reduce exclusivamente a la elección presidencial. En esta ocasión, los electores solo tendrán que decidir entre Jeannette Jara y José Antonio Kast para la máxima magistratura del país, simplificando el proceso y concentrando la atención en la definición del próximo líder nacional.
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