Ana Luz Durán:  "La Constitución está definiendo muy mal cómo quiere enfrentar el problema de la educación"

El análisis de diversas reformas en el ámbito de la educación, que se plantean en la propuesta constitucional que será votada el 4 de septiembre, fueron el tema central en la última edición del programa +Constitución: No te restes, súmate informado, el viernes 19 de agosto, emitido por radio San Cristóbal y diario La Tribuna en todas sus plataformas.

En la ocasión, participó como invitada Ana Luz Durán Báez, doctora en Derecho y Ciencias Políticas, y decana de la Facultad de Educación de la Universidad San Sebastián.

Durán analizó las modificaciones que contiene el texto constitucional en los distintos niveles y respecto a ciertas materias sustanciales sobre educación, cuyo principal enfoque es el fortalecimiento de la enseñanza pública. Hoy día hay tres elementos claves que están en el sistema educativo: la obligatoriedad, la gratuidad y la libertad de enseñanza, partió señalando la académica, aclarando que en ocasiones se tiende a esperar que todo tiene que estar en la Constitución para que se haga, olvidando lo que ya se ha ido construyendo como políticas públicas durante las últimas décadas.

Recordó que actualmente existe un sistema nacional de aseguramiento de la calidad, un sistema de desarrollo profesional docente, una ley de inclusión escolar que prohíbe el lucro y establece un sistema de selección escolar, y hay una ley de educación superior que regula el sistema en institucionalidad, fiscalización, financiamiento y calidad. Por lo tanto, podríamos decir que lo que ha pasado en el último tiempo es que se ha ido fortaleciendo el sistema de educación desde la política pública, a través de un conjunto de leyes.

Sin embargo, reconoció que todo lo que hemos hecho como país en los últimos 20 o más años con más fuerza, tiene que ver con instalar la calidad en el sistema, y la verdad es que no nos ha ido bien. Ahora, sería un poco ilusorio pensar que con solo instalarlo vamos a lograr mayor calidad. En esa línea, destacó que se crea un método más robusto en la actual propuesta constitucional, a través del Sistema Nacional de Educación.

EDUCACIÓN LAICA

Ana Luz Durán fue enfática al señalar que no se consideró la voz de las instituciones educativas en el proceso de redacción de la nueva Constitución. Hoy día, el actual gobierno está postergando el tránsito entre la educación municipal y la educación pública, por problemas estructurales importantes, indicó, advirtiendo al mismo tiempo que no se está considerando la realidad de la ciudadanía y de las familias chilenas.

Subrayó que los grandes ausentes en el texto constitucional son los colegios particulares subvencionados y las familias, lo que fundamentó afirmando que de 10 mil establecimientos existentes en el país, 6 mil son laicos, 3 mil 200 católicos, casi 500 evangélicos, 3 judíos y el resto son diversos. Entonces, cuando se dice que solo se podrá acceder a una educación laica y gratuita si es estatal, qué sentido tiene garantizar el derecho a elección; no tiene ningún sentido, criticó.

La académica expuso que aquí la sensación es que se sobrevalora lo estatal por el tipo de provisión. Entonces, cuando planteamos el tema de la calidad y digo que solo voy a centrarme en la institucionalidad y el financiamiento público, es que estoy completamente perdido, porque trato un foco que es la calidad y lo que hago es centrarme en la institucionalidad. Claramente aquí no ha habido una mirada desde la realidad del problema que existe en la educación.

Apuntó que una de las principales falencias radica en que no se ha definido adecuadamente el problema a resolver. La Constitución está definiendo muy mal cómo quiere enfrentar el problema de la educación en sus distintos niveles, desde la educación parvularia hasta la superior.

DERECHO PREFERENTE DE LOS PADRES

Ante la consulta sobre en qué lugar queda el derecho preferente de los padres y el deber de educar a sus hijos, Ana Luz Durán manifestó que por supuesto queda supeditado al Estado.

Por ejemplo, se eliminó el kínder de la propuesta constitucional. (Entonces) Claramente, aquí se está supeditando la decisión que uno tiene como persona, a este aparato enorme que va a ser del Estado y que va a estar compuesto de estos sistemas, sostuvo.

En opinión de la también doctora en Derecho y Ciencias Políticas, existe una contradicción vital y una desconexión con la política pública existente y la realidad de las familias chilenas en esta propuesta constitucional.

Finalmente, Ana Durán expresó que se requiere un nuevo debate constitucional. Mayoritariamente votamos por una nueva Constitución, pero claramente no por esta Constitución. Y en el ámbito de la educación, lo primero que hay que mirar son los pilares que ya están sentados, y que dicen relación con lineamientos no solo del país, sino que son concordantes con lineamientos internacionales que ha establecido principalmente la Unesco y el Banco Mundial.