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Durante la jornada del jueves, la Fiscalía de Osorno confirmó que tres exfuncionarios del Hospital Base de Osorno fueron detenidos en el marco de la investigación por torturas cometidas contra un trabajador con Trastorno del Espectro Autista (TEA). Un cuarto implicado permanece prófugo, mientras la Policía de Investigaciones (PDI) mantiene las diligencias para dar con su paradero.
La fiscal jefe María Angélica De Miguel detalló que las órdenes de captura fueron solicitadas tras la difusión de registros audiovisuales que exhiben las agresiones sufridas por la víctima dentro del recinto asistencial.
El caso se conoció luego de que medios de comunicación difundieran imágenes de los hechos, ocurridos entre 2018 y 2020. Ante ello, el Ministerio de Salud reaccionó con la destitución inmediata de los cuatro funcionarios involucrados y anunció la designación de un delegado especial en el hospital.
La ministra Ximena Aguilera también instruyó la apertura de un sumario administrativo para investigar posibles omisiones en la denuncia de los hechos por parte de autoridades del centro asistencial. Todos los antecedentes serán remitidos al Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH).
Por su parte, la Fiscalía informó que, además de los delitos de tortura, existen antecedentes de una denuncia previa presentada por la víctima en 2020 por lesiones menos graves contra un funcionario distinto a los acusados en este caso.
Frente a la magnitud de las pruebas actuales, un equipo especializado de la PDI asumió las diligencias que permitieron las detenciones de las últimas horas.
Se espera que este viernes 5 de septiembre se lleve a cabo la formalización de cargos.
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