Regístrate en nuestro newsletter
Las lampreas, son especies ancestrales que habitan nuestras aguas desde hace más de 470 millones de años, lo que las convierte en uno de los grupos de peces más antiguos. Aunque su aspecto extraño puede generar temor, estos peces son inofensivos y juegan un papel crucial en los ecosistemas acuáticos.
En entrevista con diario La Tribuna, el Doctor Raúl Briones, investigador pleno bioforest Arauco, quien ha realizado estudios de macroinvertebrados en aguas continentales, señaló que en esta época es común que las familias se trasladen a los ríos, más aún cuando las temperaturas superan los 30 grados. "Para capear el calor muchas familias optan por visitar algún lugar cerca de Los Ángeles, como Angostura del Biobío, Río Vergara o Saltos del Laja. Estos cuerpos de agua son hábitat de macroinvertebrados y peces y dentro de los peces, los más llamativos y que pueden producir cierto asombro son las anguilas y lampreas" dijo el investigador. En ese sentido, comentó que estos lugares, que ofrecen un respiro frente a las altas temperaturas, se convierten en hábitats ricos en biodiversidad, donde se puede observar también a macroinvertebrados.
En paralelo, el Dr. Briones advirtió sobre la importancia de disfrutar de estos parajes de manera responsable. "Aunque estos ríos y cuerpos de agua son ideales para el esparcimiento, también son entornos frágiles que deben ser cuidados. Las lampreas y otras especies acuáticas dependen de aguas limpias y bien conservadas para vivir" destacando las condiciones que han permitido a la especie sobrevivir más de 470 millones de años.
El investigador subrayó que la contaminación y las alteraciones de los hábitats pueden tener consecuencias devastadoras para la fauna local, por lo que es importante que quienes acuden a lugares en contacto con la naturaleza, mantengan las condiciones del entorno. "Es fundamental que cada persona que visite estos lugares asuma su papel en la conservación del entorno, evitando dejar basura y respetando las áreas naturales" añadió el Dr. Briones.
Los ecosistemas acuáticos saludables son vitales para las distintas especies que a su vez aportan a la biodiversidad. En el caso de anguilas y lampreas se trata de peces similares, pero con diferencias en su ciclo de vida, en su anatomía y en su alimentación. "Las anguilas son catádromas, es decir, nacen en el mar y viven en el río, como los salmones. Las lampreas son anádromas, es decir, nacen en el río y viven en el mar" detalló el Dr. Briones.
En cuanto a su anatomía, las anguilas tienen carne gelatinosa y las lampreas "un cuerpo gelatinoso, cilíndrico, sin escamas y muy resbaladizo, además carecen de mandíbula (agnato). Hay ausencia de aletas pares, y presencia de siete aberturas braquiales (para respirar en los costados).
Consultado respecto de la alimentación explicó que "las anguilas se alimentan de larvas de insectos, gusanos, crustáceos, moluscos y peces pequeños. Las lampreas se fijan a sus presas vivas con sus dientes córneos y en forma de ventosa, y succionan sangres, o sea parasitismo".
Cada verano, cuando muchas familias van a disfrutar de los ríos, es posible que en dichas aguas observen esta particular especie: La lamprea, que en ocasiones genera temor entre los bañistas. "El aspecto de las lampreas genera temor en las personas, sin embargo, son inofensivas, no muerden, ni tienen veneno. La única recomendación, si la llegan a ver, es no tocarlas. Tampoco alterar su hábitat y avisar a Sernapesca para contribuir a sus registros" expresó el Doctor Raúl Briones, investigador pleno bioforest Arauco.
Cabe indicar que nuestro país cuenta con dos especies de lampreas Mordacia lapicida (categoría En Peligro) y Geotria australis (categoría de Vulnerable).
 |
||||
 |
 |
 |
 |
 |
¿Quieres contactarnos? Escríbenos a [email protected]
ContáctanosOpinión
