Más de mil familias reciben agua en camiones aljibe en Los Ángeles

El actual escenario de escasez hídrica complica de manera directa a un total de 1.158 familias de Los Ángeles, que actualmente reciben agua potable a través de camiones aljibe que llegan hasta sus hogares, servicio que aumentó durante el último año, debido tanto al déficit hídrico como a las parcelaciones que han proliferado en las zonas rurales de la comuna, según se explicó.

El director de Seguridad e Inspección Municipal de Los Ángeles, Miguel Ángel Irribarra, dijo en conversación con diario La Tribuna que la Delegación Presidencial y la Municipalidad entregan agua. La persona hace el requerimiento de entrega de agua, que tiene que ser por razón de una emergencia o déficit hídrico. Pozos secos, pozos contaminados o fallas en algún APR. En esas situaciones, personal profesional de la Dirección de Seguridad asiste, evalúan la emergencia, levantan una ficha y envían esa ficha a la Delegación, explicó.

Irribarra contó que durante tres meses la municipalidad se hace cargo de la persona que cumple los requisitos para tener agua potable. Pasados estos tres meses, es la Delegación la que a través de camiones entrega agua a estas personas.

CASAS EN SECTORES RURALES HAN COMPLICADO LA ENTREGA DE AGUA

En estos momentos se está entregando agua a 1.158 familias de la comuna de Los Ángeles. La entrega de agua potable siempre se hace a través de camiones aljibe y con un límite de 150 litros diarios por persona, detalló el director de la Dirección de Seguridad e Inspección Municipal.

Destacó el hecho de que a las personas que tienen parcelas de agrado o una segunda vivienda, estos no cumplen con los requisitos para recibir agua potable. Muchas personas están comprando parcelas o edificando casas y luego se encuentran con la sorpresa de que no tienen agua. Cada vez que alguien adquiera un bien raíz en el sector rural deben preocuparse de tener acceso al agua. No damos abasto para entregar agua a todos los que podrían pedir agua en el sector rural, declaró Miguel Ángel Irribarra.

Al respecto detalló que en este momento tenemos nueve camiones de la delegación y tres camiones municipales en toda la comuna repartiendo agua, situación que no era así el año pasado. Este año aumentamos considerablemente la entrega de agua para entregarle un mejor servicio a las personas, a través de la visita de un profesional para realizar la ficha hídrica y ver si se cumplen los requisitos, explicó Irribarra. El director de Seguridad e Inspección Municipal de Los Ángeles observó que muchos de los casos que atienden son segundas viviendas. Las personas compran terrenos en lugares bastante apartados y no saben que al adquirir un terreno sin agua, siendo segunda vivienda, dificulta mucho la entrega de agua potable.

SOLICITUDES EN AUMENTO

Irribarra llamó a quienes reciben agua potable entregada por la Municipalidad o la Delegación Presidencial, a ocuparla para beber o asearse. Nos hemos encontrado con situaciones en que las personas no utilizan esta agua para el fin que la destina la autoridad, que es su consumo. El año pasado hubo un aumento considerable de entrega de agua potable. Siguen llegando solicitudes pero ya se está regularizando la situación, lo que se da porque este año hubo más aguas lluvia que permitió que muchos pozos que estaban secos recuperaran en alguna medida su caudal normal, explicó el director municipal. Además observó que se ingresan alrededor de dos a tres solicitudes diarias de entrega de agua, donde se evalúa si corresponde o no. La regulación de las parcelaciones ha influido también en la disminución de la entrega de agua potable. Lo ideal sería no entregar agua de esta manera, sino que se constituyeran APRs, puntualizó el vocero municipal. El director de Seguridad e Inspección Municipal valoró el rol fundamental que juegan las APR, razón por la que los proyectos de Agua Potable Rural que hay en el municipio van a la par con el requerimiento que tengamos de agua. En los lugares más críticos se proyectan los APR. Así podemos disminuir la entrega de agua, dijo el encargado de la oficina municipal refiriéndose a la realidad que viven algunas personas de la comuna, que influyen en su capacidad de realizar actividades del día a día producto de, entre otros factores, los cambios demográficos traídos por la pandemia del Covid-19.