El último informe del Instituto Nacional de Estadísticas (INE) calculó la tasa de desocupación de la región del Biobío en 9% entre marzo y mayo de 2025 —apenas un punto porcentual por encima del promedio regional de la última década—. Sin embargo, el panorama del empleo continúa generando inquietud entre autoridades, gremios y expertos del sector económico.
El seremi de Economía, Javier Sepúlveda, destacó que si bien el desempleo no ha alcanzado los niveles críticos proyectados tras el cierre de la Siderúrgica Huachipato, el escenario no es del todo alentador. "Se proyectaba que podíamos llegar a tasas por sobre el 10%, incluso un 12%. No ha ocurrido, en parte gracias al plan de fortalecimiento industrial", señaló.
En la provincia de Biobío, la tasa de desocupación fue del 8,8%, por debajo del 9,2% registrado en el mismo período de 2024. Según Sepúlveda, ello refleja "un dinamismo y resiliencia importante del sector productivo provincial".
GREMIOS LOCALES ADVIERTEN INFORMALIDAD
Desde el ámbito empresarial, la visión es más crítica. Wilson Garcés, presidente de la Asociación de Pequeños Industriales y Artesanos de Los Ángeles (Apialan), planteó que la estabilidad de la tasa de desempleo no oculta desafíos de fondo.
Garcés también apuntó a la desaceleración del sector industrial, al señalar que "aunque algunos sectores como educación se mantienen estables, otros, como la manufactura, se han debilitado por políticas que no incentivan la inversión".
MEDIDAS ESTRUCTURALES
Para Carlos Smith, economista del Centro de Investigación de Empresa y Sociedad (CIES) de la Universidad del Desarrollo, la cifra de 9% "sigue siendo alta" y refleja la incapacidad de absorber la fuerza laboral que se incorpora al mercado.
PRESIÓN EN LA VEGA DE LOS ÁNGELES
Desde la economía real, Carlos Hernández, presidente de la Casa de la Vega de Los Ángeles, entregó un diagnóstico con fuerte énfasis territorial, al señalar que la informalidad laboral es uno de los factores tras estos resultados.
En ese sentido, Hernández indicó que el cierre de empresas como Huachipato y la baja en la producción agrícola están afectando directamente a los sectores ligados al transporte y la distribución de productos locales.
El dirigente también mostró preocupación por el efecto de las heladas extremas de este invierno, que han dañado severamente las cosechas, encarecido productos y disminuido la calidad de las verduras.
"Las heladas han sido brutales. No sabemos si es el cambio climático, pero estamos perdiendo producción como no se había visto. Y eso, a mediano plazo, va a impactar al empleo agrícola. La economía circular aquí se está viendo afectada", concluyó.
PROYECCIONES MODERADAS, PERO INCIERTAS
A pesar de que las cifras actuales muestran cierta estabilidad en el empleo regional, el consenso entre autoridades, gremios y analistas es que el mercado laboral del Biobío enfrenta un escenario frágil, donde la informalidad, la caída de sectores clave como la industria y la brecha de género siguen representando desafíos importantes.
La combinación de factores estructurales y coyunturales —como el clima, la desaceleración económica global y el cierre de industrias históricas— configura un escenario donde la generación de empleo formal, sostenible y bien remunerado será clave para mantener la estabilidad social y económica de la región.
