Yumbel: historia de fe y devoción a San Sebastián

Ubicada a 59 kilómetros de la ciudad de Los Ángeles, Yumbel es una comuna de la provincia de Biobío conocida por su santo patrón, San Sebastián.

Su historia siempre ha estado ligada a la veneración de este santo, celebrada el 20 de enero y el 20 de marzo de cada año.

Históricamente, en estas fechas llegan a Yumbel más de 500 mil feligreses a agradecer por el favor concedido o a realizar alguna manda.

La historia de San Sebastián se remonta al año 1655, cuando los araucanos atacaron la ciudad de Chillán. Ello motivó a los españoles a trasladar la imagen del santo a las cercanías de Yumbel para evitar que fuera profanada.

Transcurría el año 1663 cuando un juez eclesiástico adjudicó la imagen de San Sebastián a Yumbel. Mientras los habitantes de Chillán reclamaban la imagen como suya, los de Yumbel argumentaban su derecho de hallazgo.

La imagen del santo fue trasladada a la plaza fuerte donde estuvo hasta 1757, siendo posteriormente depositada en la parroquia.

No fue hasta 1835 cuando el santo fue trasladado en el templo ubicado en el sector antiguo de la villa, fecha en que fue destruida por un terremoto. Sin embargo, cuenta la historia que la imagen resultó intacta.

No fue hasta 1766 cuando Yumbel quedó oficialmente bajo la protección de San Sebastián. Entre 1835 y 1859, la imagen del santo permaneció en un templo provisional mientras se constituía el definitivo, donde permanece desde 1859 a la fecha.

El inicio de las primeras peregrinaciones a Yumbel data de 1878, cuando la fama del santo trascendió la frontera de Yumbel, extendiéndose por el resto del país.

La imagen de San Sebastián está fabricada de madera de cedro y tiene una altura de 73 centímetros de alto.

Cada 20 de enero y 20 de marzo, la festividad de San Sebastián comienza con la procesión de traslado de la imagen al campo de oración, el día 11 del mismo mes.

Durante esos días, se comienza la novena en honor a San Sebastián.

20 DE ENERO

Quienes han escuchado hablar de San Sebastián saben que es un santo que es muy cumplidor y que concede milagros, pero que cuando no le cumplen es igualmente cobrador.

Pese a ello, el fervor de sus fieles se ha mantenido a lo largo del tiempo. Tanto así que, para el próximo fin de semana, Yumbel espera recibir a más de 600 mil personas.

El municipio de la comuna santuario ya está realizando reuniones de coordinación para abordar las medidas necesarias, ante la gran cantidad de personas que se espera que lleguen el próximo 20 de enero.

Así lo confirmó el alcalde de Yumbel, Juan Cabezas, quien sostuvo que el martes recién pasado se reunieron con otras entidades públicas -como Carabineros y la Policía de Investigaciones- para analizar y organizar hasta el más mínimo detalle.

Asimismo, efectuaron coordinaciones con Bomberos y otras organizaciones “a fin de afrontar de mejor forma la atención de nuestros visitantes”, expresó el edil.

La máxima autoridad comunal relató ya han adoptado algunas medidas como, por ejemplo, no permitir la venta de comidas, que involucren fogones o cocinillas, entre otros puestos donde se comercialice ropa y otras especies.

El objetivo es prevenir algún siniestro y tener que lamentar víctimas o pérdidas materiales.

De igual forma, dispondrán de baños para los peregrinos y para quienes visiten Yumbel durante esta festividad religiosa, a pedido de la Iglesia Católica.