1
Regístrate en nuestro newsletter
La demanda energética crece proporcionalmente al aumento demográfico mundial, donde ya somos 8 mil millones de personas, de los cuales, según la ONU, un 13% de la población no accede a servicios modernos de electricidad.
Se estima que 3 mil millones de personas dependen de combustibles como madera, carbón o desechos de origen animal para cocinar o calentar comida, que equivale a cerca del 60% de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero. A esto, que ya es perjudicial, se suma la falta de ventilación en espacios cerrados donde el uso de estos combustibles como energía doméstica causó 4,3 millones de muertes, de las cuales 6 de cada 10 fueron mujeres y niñas. Es otra cara de una matriz energética que, por muchos años, no consideró el crecimiento y acceso a servicios de energía limpia, asequible y segura.
En 61 años nuestro país aumentó su población en un 136.2%, con un consecuente consumo de energía que ha llevado a proyectar distintos escenarios para un futuro con carbono neutralidad. Para ello, se trabaja en el retiro gradual de las centrales a carbón (al 2030) y se aumentó el presupuesto de inversión en energías renovables, en concordancia con el ODS N°7 de la ONU, que busca garantizar el acceso a una energía asequible, segura y moderna.
Afortunadamente, Chile transita hacia una matriz energética acorde a lo señalado por la ONU, disminuyendo considerablemente el uso de combustibles fósiles y emisiones de gases de efecto invernadero. De acuerdo a un informe ember-climate, desde octubre de 2021 a septiembre de 2022 la generación eólica y solar aumentó en un 27,5%, en tanto, a carbón sólo alcanzó el 26,5% en coherencia con lo logrado anteriormente, donde la generación eólica y solar se duplicó, pasando de 9TWh (12%) a 18 TWh (22%) en 2021.
En los últimos 6 años aumentamos la demanda de electricidad (11%), pero las emisiones de CO2 bajaron sólo un 6%, lo que invita a trabajar colaborativamente, entre distintas entidades y personas, para alcanzar una red eléctrica 100% sin emisiones para el año 2050.
Avanzar en la descarbonización implica contar con especialistas de áreas eléctricas y de energías renovables, como ingenieros y técnicos en electricidad, técnicos en energías renovables y eficiencia energética e ingenieros en energías renovables y sustentabilidad ambiental, cuyas capacidades creativas y de innovación permitan un trabajo interdisciplinario que continúe impulsando el futuro energético de Chile.
Instalar esa cultura de energías renovables y cuidado medioambiental, como se ha hecho hasta ahora alcanzando cifras que dan esperanza de una diversificación de la matriz energética que permita cumplir los compromisos para aportar a equilibrar el cambio climático, es un esfuerzo que debemos hacer en conjunto.
El futuro depende de hacernos cargo del presente con responsabilidad, colaboración e innovación, desde la base de la creatividad y el eco diseño, transitando a fuentes renovables de energía. Saber hacer y ser sustentables como estilo de vida porque, así, apuntamos a un desarrollo humano y sostenible para el bienestar de todos y todas.
Danilo Hernández Ulloa
Director de Escuela Tecnológica Industrial.
 |
||||
 |
 |
 |
 |
 |
¿Quieres contactarnos? Escríbenos a [email protected]
ContáctanosOpinión
