Cuando concluye el periodo de Fiestas Patrias, que este año se extendió por 5 días, siempre viene el periodo de balances.

Uno de los clásicos es el balance que realizan los ramadistas, quienes -por lo general- siempre quedan con gusto a poco pensando ya en el 18 chico.

Sin embargo, el balance que quiero destacar, y que nos debiera importar como ciudadanos, es la disminución de accidentes de tránsito para estas Fiestas Patrias.

Afortunadamente en este 2019 se registró un 26% menos de accidentes con respecto al año anterior. La misma situación ocurrió con los accidentes fatales, donde la cifra descendió  a 24 personas. 

En esta disminución quiero destacar la implementación de la Ley Emilia, vigente desde el 16 de septiembre del 2014, que sanciona con cárcel efectiva de al menos un año, la conducción en estado de ebriedad que provoque lesiones graves, gravísimas o la muerte.

Su aplicación ha resultado efectiva desde su promulgación, ya que las cifras de personas fallecidas por accidentes de tránsito han disminuido en cerca de un 50%.

Recordar que esta legislación también tipifica como delito el huir del accidente cuando se produzcan daños, y negarse a la aplicación del alcotest; ambas situaciones que también han servido como elementos disuasivos.

Pero fuera de la aplicación de la Ley Emilia, quiero destacar también a quienes hacen cumplir esta normativa, es decir, el personal de Carabineros.

Tanto en mi calidad de alcalde y como ciudadano, me tocó transitar por distintos sectores de la provincia, donde satisfactoriamente pude ver gran presencia de efectivos policiales en las rutas.

Esta situación también se registró en Antuco, donde los uniformados también se desplegaron por los puntos más críticos de la comuna.

Pese a lo anterior, de todas formas hubo conductores que no respetaron las normas del tránsito, aprovechándose de algunos sectores sin fiscalización.

Un claro ejemplo lo tuvimos en Antuco, donde los automovilistas hicieron caso omiso a los controles policiales, conduciendo a alta velocidad por algunas extensiones de la Q-45.

La situación se registró, principalmente, fuera del radio urbano, en el trayecto que pasa por las diversas villas rurales de la comuna.

No está de más recordar que en estos sectores vive casi la mitad de la población de la comuna, donde más de un niño debe cruzar la carretera para ir a comprar o visitar a un vecino.

Por lo tanto, el llamado es a los conductores a la responsabilidad, porque nuevamente estamos quedando al debe con nuestro compromiso al volante.

Como autoridades podemos hacer muchas cosas para evitar accidentes, como por ejemplo adquirir una pistola radar o conseguir un nuevo carro policial, no obstante, de nada vale si no tomamos conciencia como conductores.

Un claro ejemplo fueron los controles de drogas al volante, los que experimentaron un alto porcentaje de resultados positivos (25%), lo que habla que cómo conductores aún tenemos mucho que aprender.