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En medio de un escenario global marcado por la sobreproducción y el consumo desmedido de textiles, Luz Eliana Avilés encontró en la reutilización de prendas una forma de vivir, crear y aportar desde Los Ángeles a la economía circular.
Su emprendimiento, Artesa Lula, no solo busca rescatar jeans en desuso, sino que convertirlos en productos únicos, funcionales y con diseño personalizado. Bolsos, delantales, monederos y estuches son algunas de las piezas que crea con sus manos, siempre bajo una premisa: dar una nueva vida a lo que para otros es desecho.
Así comenzó, hace cuatro años y con una máquina de coser, una marca reconocida en ferias locales y círculos de consumo consciente.
Cada pieza de Artesa Lula nace de la observación y de un proceso de diseño donde nada es al azar. Confeccionar ropa y accesorios a partir de jeans usados no solo requiere técnica, sino también ingenio para aprovechar texturas, colores y formas preexistentes.
"Ya tengo un público que prefiere productos responsables con el medio ambiente", afirma con orgullo, aludiendo al vínculo que ha logrado establecer con sus clientas habituales, muchas de ellas conocedoras del valor de la producción local sustentable.
En ferias como la de Plaza Pinto, Luz no solo exhibe sus creaciones, sino que también educa: explica su proceso, cuenta la historia de su marca y demuestra que la sustentabilidad puede ser una alternativa concreta y viable para emprender.
Un punto clave en su crecimiento fue el programa Mujer Emprende, del Servicio Nacional de la Mujer y la Equidad de Género (SernamEG), que cursó de manera virtual. "Este curso me entregó herramientas fundamentales para gestionar mejor mi negocio y fortalecer mis habilidades como emprendedora. Una cosa es saber coser, pero otra muy distinta es levantar un negocio con visión", asegura.
Durante 40 horas recibió formación en marketing, atención al cliente, administración, innovación y herramientas digitales. Además del aprendizaje técnico, valoró especialmente el trabajo en habilidades blandas, como liderazgo, comunicación y autoconfianza. "También aprendí a valorarme como emprendedora y a visibilizar lo que hago", relata.
El programa Mujer Emprende tendrá este 2025 una versión fortalecida, que incluye la "Academia Mujer Emprende", desarrollada junto a la Universidad de Chile. Este espacio de formación digital incorporará contenidos técnicos y metodológicos con foco en sostenibilidad, redes colaborativas y un fondo inédito de financiamiento para iniciativas colectivas.
"Invito a todas las mujeres que tengan una idea o un proyecto a que se sumen y aprovechen esta oportunidad", comenta Luz Eliana.
En su caso, este acompañamiento institucional ha sido clave para proyectar su negocio más allá de la comercialización individual y trabajar con otras mujeres, creando espacios colaborativos y expandiendo la red de consumo responsable en la provincia.
Detrás de cada bolso o delantal de Artesa Lula no solo hay una costura, sino que también una historia que cruza ecología, autodeterminación y economía local.
Desde su puesto en la feria hasta su mesa de trabajo, Luz Eliana Avilés demuestra que emprender también es un acto de conciencia, que es posible dar valor al residuo, aportar al medio ambiente y construir una marca con identidad territorial desde Biobío.
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