Lluvias y anegamientos marcaron el fin de semana

A tan solo 20 días de la llegada de la temporada invernal, en Los Ángeles ya se comienzan a experimentar temperaturas bajo cero. Afortunadamente, la ola de frío se vio aplacada en gran medida por las recientes lluvias que se registraron durante el primer fin de semana de junio.

Según el último balance entregado desde la Municipalidad de Los Ángeles, al 05 de junio se registraron 46,2 mm de aguas-lluvias. Pero a pesar de que está lejos de ser una cifra récord, de igual forma causó distintas repercusiones en sectores rurales y urbanos de la comuna angelina.

En el caso de Cantarrana, el agua acumulada provocó anegamientos en el acceso principal, imposibilitando el paso de vehículos pequeños, lo que complicó a más de un vecino.

En otros sectores, como Santa Fe, Virquenco, villas San Francisco, Altos del Retiro Sur, Mirador Oriente y San Carlos Purén, trabajaron cuadrillas de Emergencia Municipal para minimizar las complicaciones derivadas de distintos anegamientos, ya sea por desbordes de canales como por alcantarillados rebalsados, según se informó.

Situaciones similares se vivieron en las villas Génesis, El Esfuerzo y Todos Los Santos, donde también debieron concurrir funcionarios del municipio para resolver los problemas derivados del apozamiento de aguas-lluvias. Esto, a raíz de que diversos materiales de desecho que obstruían los desagües de los sectores más afectados, de acuerdo al reporte entregado desde la Municipalidad.

En ese sentido, desde la corporación edilicia se hizo un llamado a la ciudadanía a dejar de arrojar basura en lugares no habilitados, ya que esto causa un ambiente propicio para los anegamientos. Los desechos y/o escombros deben ser depositados en lugares establecidos por el municipio como lo es el Punto de Gestión de Residuos, ubicado en el Polideportivo.

Por último, se aseguró que los profesionales encargados de solucionar estos problemas seguirán realizando su arduo trabajo en cada uno de los sectores que lo necesiten. Sin embargo, evitar nuevas inundaciones depende, en gran medida, de la conciencia de la comunidad angelina que ya se prepara para un invierno que está a la vuelta de la esquina.