Vecinos podrán enseñar a captar agua lluvia y proteger suelos erosionados

Hacer frente a los problemas de escasez de agua y mejorar los cultivos de los suelos en comunas con alto grado de sequía es el objetivo de la certificación que la Corporación Chilena de la Madera (Corma), Forestal Mininco y el Centro de Educación y Tecnología (CET) otorgaron a 35 vecinos de diferentes comunas de la provincia de Biobío.

Este segundo programa se ejecutó entre abril y julio del año pasado, donde se formó desde cero a monitores vecinales que a partir de hoy serán los encargados de transferir los conocimientos aprendidos a sus propios vecinos.

En total fueron ocho jornadas de formación técnica, las cuales estuvieron a cargo de los profesionales del Centro de Educación y Tecnología.

A los vecinos se les enseñó, de manera práctica, a instalar tambores para capturar el agua lluvia que cae desde los techos, y a construir minirrepresas y pozos profundos con sistemas eficientes de riego.

Para conservar los suelos, se les capacitó en confeccionar abonos orgánicos sólidos y líquidos. Y aprendieron además a utilizar la energía solar para uso domiciliario.

En adelante estos monitores serán los encargados de transferir los conocimientos aprendidos a sus propios vecinos.

El vicepresidente regional de Corma, Eduardo Hernández, se refirió al origen de este programa. “Esta iniciativa partió hace un par de años, cuando vimos la necesidad de varios municipios de capacitar a sus vecinos en varios temas, y uno de esos temas era el agua, dado el gran déficit hídrico de los últimos cinco años. Hoy los monitores son embajadores de lo que aprendieron y ellos están muy contentos y dispuestos a distribuirlo en sus comunas”.

En la misma línea, el gerente de Asuntos Públicos de Forestal Mininco, Augusto Robert, se refirió a la alianza celebrada con el CET para implementar este tipo de proyectos.

“Surgen necesidades de nuestros vecinos para gestionar el agua; así se inicia una búsqueda por un ente técnico que nos ayude a entregar un curso de manera rápida y ágil, y que le permita a nuestros vecinos contar con herramientas para implementar estas cosechas de agua a bajo costo y con materiales simples”, dijo.

Además, Eduardo Hernández anunció la continuidad que el gremio le dará a este proyecto. “Para dar un paso más en el traspaso del conocimiento adquirido en estos talleres, próximamente Corma y CET firmarán un convenio marco que establecerá líneas de acción que permitan darle proyección y estabilidad al proyecto”, explicó.

Con esta ceremonia de certificación se cierra el primer ciclo de capacitaciones para los vecinos de la provincia del Biobío. Al respecto, el director del Centro de Educación y Tecnología, Agustín Infante, señaló que “los participantes han quedado contentos; el capital social de conocimiento ha quedado en las comunidades y esperamos que en la próxima etapa, que es la de replicar estas tecnologías, resulte todo bien y podamos sacar adelante los problemas que se nos vienen, como el cambio climático y la degradación de los suelos”.

Entre los beneficiados de este programa está Esther Molina, vecina de la comuna de Tucapel, quien se mostró agradecida. “Me llevé una muy grata sorpresa en el sentido de haber aprendido tantas cosas que uno puede realizar en nuestras viviendas, y cómo poder replicar estas técnicas con nuestros vecinos; la experiencia ha sido increíble”.

Por su parte, Iván González, presidente del sector de San Luis de Malven, comuna de Mulchén, señaló que “en sí la gestión y el aprendizaje de este curso fue demasiado buena, lo cual nos va a dar el potencial para poder ayudar a nuestros vecinos por la escasez hídrica que hay, y en su defecto poder orientar cómo hacer la recolección del agua que muchas veces perdemos dentro de nuestro territorio”.

Esta actividad forma parte de los Convenios de Cooperación Mutua que Corma, sus empresas forestales asociadas y 26 municipios de la región del Biobío suscribieron el primer trimestre de este año.