La ruta de la fruta antes de ser de exportación

** Arándano es el berries que más se exporta, y su principal mercado es el asiático, donde deben ser enviados con etiquetas especiales y embalaje de acuerdo a sus exigencias.

La fruta chilena es muy cotizada en varios países del mundo, especialmente en el mercado Asiático, Europa y en Norte América, sin embargo para salir de las fronteras nacionales debe pasar por varios procesos, eso con tal de cumplir con los requisitos impuestos por Chile y por los compradores internacionales.

Actualmente, los arándanos es una de las variedades frutales chilenas que más son requeridas por los mercados internacionales, especialmente por el Asiático, principal destino que existe hoy, después que Estados Unidos restringiera la entrada de frutas chilenas a su país.

Es dado lo anterior que Hortifrut, es una de las grandes potencias en cuanto a la exportación de berries de Chile, especialmente del fruto antes mencionado, donde en la temporada en todas sus plantas envían hacia al exterior alrededor de 5 millones de kilos.

Pero, para poder exportar esa cantidad de frutas hacia los principales mercados internacionales, la fruta antes debe pasar por varios procesos, además de una selección de ellas, el packing que las personas deben hacer de ellas, del frío en el cual la tienen que mantener para su almacenaje y posterior envío, estas también deben fiscalizada por el Servicio Agrícola y Ganadero, ello para asegurar a los países de orígenes que los ejemplares van libre de toda plaga.

Desde la empresa Hortifrut, nos cuentan que la fruta se separa en pallet y que estos tienen distintos colores según el país donde se enviaran, por ejemplo los amarillos o naranjo están destinados a Holanda, mientras que los negros van hacia Inglaterra. Además de ser diferenciados por el color de los pallets, estos tienen etiquetados, los que van según los detalles que pida el país que recibirá el producto, donde se pueden ver los códigos de los productores, donde fue el packing, el calibre, entre otros detalles, eso con tal de tener cualquier tipo de problema con ese envío en particular, se sepa cuál es el origen real de la fruta y quien es el productor y donde fue el proceso de packing.

El etiquetado, la forma de embalaje, el calibre de la fruta, entre otras cosas, nos cuentan desde el SAG que va según el país de origen, “se exige en Chile un cierto etiquetado el que va siempre en todas las frutas, pero además los países exigen otras cualidades que hay que detallar las que se les suma al detalle puesto por nuestro país”, explicó el coordinador regional de exportaciones del SAG, Francisco Flores.

El jefe de Operaciones del frigorífico de Hortifrut, Pablo Morales, contó que la fruta demora distinto lapsos de tiempo en llegar a los países que ese envía, y que por ejemplo al mercado Asiático tarda alrededor de 45 días, aproximadamente, por lo que ellos exigen que el embalaje de los arándanos estén con una bolsa sellada, eso para evitar deshidratación debido al tiempo de llegada.

Pero, antes de poder dar el vamos, y ya con el envasado y etiquetado listo, la fruta debe pasar por la fiscalización del SAG, donde ellos seleccionan un pallet de cada montón que tienen para el envío y ven las condiciones en la cual se encuentra la fruta, para eso un profesional o más del Servicio Agrícola y Ganadero, se encuentran trabajando durante la temporada en Hortifrut.

Pablo Morales, contó que la planta de Los Ángeles trabaja con frutas propias de sus plantaciones como también de productores de diferentes partes del país, además, mencionó que con el SAG trabajan en conjunto el programa de Origen, con el que fiscalizan para mercados como el de Asia, especialmente China y otros países de Europa.

En cuanto al trabajo que hace la empresa en conjunto con el SAG, Morales explicó que la colaboración ha sido importante, eso para los tratados y lo que es exportación de las frutas, “es un trabajo que se hace en forma eficiente, rigurosa, y además que todos trabajamos en torno a protocolos, procedimientos, ya que cada mercado tiene sus exigencias, y es por eso que debemos cumplir con los requerimientos de forma ordenada, eficiente y respetar el protocolo”, indicó Morales.  

Bajo ese sentido, el encargado de protección agrícola y forestal del SAG en Biobío, Rodrigo Ther, indicó que “el objetivo principal de la presencia de la entidad en las plantas es certificar que el producto que se inspecciona cumpla con las condiciones fitosanitarias del mercado de destino”, explicó.

Francisco Flores, detalló que los países de destino piden distintas exigencias que el SAG debe hacer valer antes de enviar la fruta en sí, eso como el etiquetado, que la fruta cumpla requerimientos para que lleguen sin plagas al mercado donde la fruta es enviada, eso es lo principal a fiscalizar por parte de la entidad.

“La norma 9001 nos ha permitido estandarizar los procesos, y de cierta forma la actividad que hacemos en esta región se realiza de la misma forma en otras partes del país”, detalló Flores agregando que las plantas para exportar tienen que cumplir con condiciones y con acuerdos, por ejemplo el acuerdo operacional y tener una resolución que emite el jefe de oficina del Programa de Origen.

“El acuerdo operacionales son en los que existen responsables que cumplen con todo lo que está detallado por los instructivos. Una vez que la planta cuenta con un acuerdo, quiere decir que fue previamente verificada y fiscalizada por un supervisor, para poder aprobar el establecimiento. Entonces, así la planta puede operar como adscrita, donde hay una contraparte profesional y técnica con cursos, o como planta no adscrita que es en la cual donde hay un interlocutor válido, con la diferencia que en esta planta no adscrita despacha SAG”, explicó el coordinador regional de exportaciones del Servicio Agrícola y Ganadero de Biobío.

El programa antes mencionado, Origen, que fiscaliza y ve los protocolos de salida es sólo aplicado para algunos países, como los asiáticos, europeos, Canadá, en el caso de Estados Unidos, que en su tiempo fue el principal mercado de los arándanos chilenos, actualmente se rige por otro programa el de cooperación que existe entre el SAG-USDA, el de preembarque al país de los estados, ya que ellos se rigen por otros protocolos y piden otras cosas para ver los fitosanitarios.