
Los funcionarios, dos sargentos, tres cabos y un carabinero, fueron controlados cuando ingerían sidra de manzana y vino tinto en el casino de la unidad policial, lo que provocó de inmediato la investigación administrativa.
El caso, que fue pasado a la Fiscalía Militar, seguirá siendo investigado en dicha instancia ya que es independiente del proceso administrativo que terminó con la expulsión de los uniformados.
