La región del Biobío cerró el trimestre móvil junio-agosto de 2025 con una tasa de desocupación del 9,9%, lo que representa un alza de 1,4 puntos porcentuales en comparación con igual período del año pasado.
En números simples, hoy son 77.790 las personas que buscan empleo sin encontrarlo, 12.000 más que hace un año, según el último informe del Instituto Nacional de Estadísticas (INE).
La cifra deja al Biobío como la segunda región con mayor desempleo del país, solo superada por Ñuble (10,1%). Y aunque el total de ocupados llegó a 708.882 personas, con un leve aumento de 0,2% en doce meses, ese crecimiento fue insuficiente frente al dinamismo de la fuerza laboral, que avanzó un 1,7%.
DESEMPLEO FEMENINO
La fotografía regional también muestra una brecha de género: mientras la tasa de desocupación en hombres llegó a 9,4%, en mujeres se ubicó en 10,6%. Esto preocupa especialmente porque muchas de ellas son jefas de hogar.
En materia de sectores productivos, los que impulsaron la ocupación fueron construcción (+8,9%) y minería (+28,6%), mientras que la industria manufacturera y la enseñanza mostraron retrocesos de -7,1% y -2,9%, respectivamente.
INFORMALIDAD AL ALZA
Otro dato que encendió las alarmas es la tasa de ocupación informal, que alcanzó un 25,9%. En total, casi 184.000 personas trabajan sin contrato ni protección social, lo que implica un alza de 2,4% en un año, con mayor incidencia en los hombres.
Desde el mundo empresarial y gremial, la presidenta de la Cámara de Comercio, Servicios y Turismo (CNC) de Los Ángeles A.G., Claudia Illesca, manifestó que las cifras golpean directamente a las familias y a las pymes locales.
"Detrás de cada punto porcentual hay personas, familias y pequeños negocios que ven afectada su estabilidad. Esta situación debe ser abordada de forma seria y con visión de largo plazo. El comercio local sigue siendo uno de los mayores generadores de empleo en la región, pero necesitamos herramientas y colaboración real para mantener y aumentar ese aporte, especialmente en tiempos complejos", señaló.
Hernández también destacó que, pese al complejo panorama, el turismo y la diversificación económica pueden ser representar una oportunidad: "El Biobío tiene un enorme potencial turístico que requiere mano de obra formal. Si logramos potenciar la economía circular, las pymes y el turismo sustentable, podemos abrir nuevos espacios de ocupación".
MIRADA ACADÉMICA
Desde la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad Andrés Bello (UNAB) sede Concepción, el académico Jaime Vera explicó que la raíz del problema está en la falta de dinamismo productivo.
Frente a la situación, el académico aseguró que "se necesitan cambios importantes para recuperar la senda del crecimiento y generar nuevos puestos de trabajo permanentes".
Por su parte, Viviana Vejar, máster en Economía e investigadora de la Universidad del Desarrollo (UDD), el aumento de la desocupación en el Biobío responde principalmente a que la fuerza laboral crece más rápido que los empleos disponibles.
LA VISIÓN DESDE EL AGRO
Desde el ámbito agrícola, José Miguel Stegmeier, vicepresidente de la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA) y presidente de la Sociedad Agrícola del Biobío (Socabio), señaló que el aumento del desempleo no sorprende.
"Lamentablemente es una situación que suponíamos. La región ha ido perdiendo sostenidamente fuentes de empleo porque sectores relevantes como la pesca, forestal, siderúrgico y servicios afines han sufrido por razones de mercado, malas políticas públicas o incluso incendios intencionales. Eso evidentemente repercute en el mercado laboral", concluyó.