Proponen plan de acción para retomar actividad en los Saltos del Laja

Desde marzo que la actividad turística en Los Saltos del Laja se ha reducido casi a cero. Desde que se decretó la emergencia sanitaria por la pandemia del coronavirus, el número de visitantes mermó de manera significativa en uno de los destinos turísticos más demandados a nivel nacional.

Lo positivo fue que como todo partió en marzo, se aprovechó la mejor parte de la temporada turística 2019-2021 con la escena habitual de cientos de personas recorriendo las cascadas principales, además de copas los hoteles, hostales, restaurantes, locales de comida al paso, además de campings, piscinas.

Sin embargo, en los meses siguientes, los días pasaron lentos y lánguidos, solo matizados por la visita de algún turista eventual que, en la época invernal, se conformó con la foto de las cascadas en su mayor apogeo.

Sin embargo, cuando en abril se retomaba la actividad normal, las medidas restrictivas impuestas por el Ministerio de Salud fueron diluyendo la posibilidad de una temporada habitual.

Sin embargo, ya a fines de octubre, La Tribuna advirtió que mientras Cabrero estaba con cuarentena de fin de semana, no se podía estar en el costado norte del puente sobre el río Laja porque corresponde a esa comuna. La situación contrastaba con la del lado sur, que pertenece a Los Ángeles, porque no había impedimento para desplazarse.

La historia se revirtió desde diciembre cuando la capital provincial entró en confinamiento total mientras que Cabrero siguió con cuarentena de fin de semana. En la semana pasada, hubo protestas de comerciantes del sector y autoridades locales que exigieron considerar la situación global del territorio para procurar sostener a la actividad que gira en torno a los turistas.

José Sanzana, que oficia de vocero de la Cámara de Turismo de Los Saltos del Laja, abogó por un plan de trabajo que permita resolver dos aspectos. Lo primero es entender el territorio desde una perspectiva más amplia e integradora que las actuales divisiones administrativas y, en segundo término, que se pueda trabajar de tal manera se resguarde la salud de la población y sea posible la subsistencia del rubro.

El dirigente insistió en que la evidente baja de turistas repercute en la vida cotidiana de los Saltos del Laja, cuya única fuente laboral es el turismo.

Hizo notar que debido a que como más del 80 por ciento de la capacidad de camas está por el lado de Los Ángeles (que está en cuarentena), los turistas que llegan por Cabrero no pueden pernoctar. Esto también repercute en Cabrero por la venta de insumos, de artesanías y gastronomía.

Los habitantes de los Saltos del Laja hacemos un trabajo colectivo. Para nosotros no existe división de Cabrero, Yumbel o Los Ángeles y esa es la problemática de fondo. Lamentablemente, la Autoridad Sanitaria no lo ha entendido ni lo ha visibilizado, sentenció.