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El Estadio Municipal volvió a llenarse de energía, pasión y zancadas con la reciente realización del Torneo Atlético Raúl Guarda, organizado por el Club de Atletismo de Los Ángeles (CALA). Una fiesta deportiva que convocó a diversas delegaciones del centro y sur del país y transformó la pista en un escenario vibrante de esfuerzo y talento.
Sin embargo, entre aplausos, tiempos destacados y abrazos de celebración, una realidad inevitable volvió a hacerse evidente: las marcas obtenidas no pudieron ser validadas para torneos clasificatorios sudamericanos. ¿La razón? La pista ya no cuenta con certificación otorgada por la Federación Atlética de Chile (Fedachi).
A pesar de que aún se ve en buenas condiciones, la carpeta instalada en 2010 ya no cumple con los estándares de World Athletics, lo que la deja fuera del rigor técnico que exigen las competencias oficiales.
Han pasado más de 14 años desde que la moderna superficie sintética reemplazó a la antigua pista de ceniza, luego de una inversión que superó los $337 millones, aportados por el Instituto Nacional de Deportes (IND). Desde entonces, miles de deportistas angelinos le han dado un uso constante, responsable y provechoso.
La vida útil de una pista atlética en Chile —explican los expertos— no supera los ocho años, incluso con un mantenimiento adecuado. Y en Los Ángeles, más allá de repintarla, no se ha realizado ninguna intervención mayor que permita extender su durabilidad.
Hoy, los 400 metros de cuerda, sus ocho carriles y las zonas de salto y lanzamientos dan cuenta del desgaste natural de más de una década de uso ininterrumpido.
Ya en 2022, el entonces alcalde Esteban Krause advertía la urgencia de renovar la carpeta. En aquella oportunidad destacó el compromiso expresado por el IND para concretar el traspaso de los recursos durante el actual periodo de gobierno. Sin embargo, han pasado los años y la entidad aún no se pronuncia sobre el financiamiento del mejoramiento de la pista.
Tanto deportistas como entrenadores vuelven a plantear la misma inquietud: ¿cuándo se ejecutará el recambio?
Desde el IND han señalado que el proyecto contemplaba un trabajo de retoping: una solución que permitiría rejuvenecer la pista sin reconstruirla por completo. Lo cierto es que el costo para recuperarla, bajo esta modalidad, supera los $300 millones.
En cualquier caso, la pasión por el atletismo se siente fuerte en la ciudad. El Torneo Atlético Raúl Guarda lo demostró una vez más: niños, jóvenes y adultos compitiendo con orgullo, pese a las limitaciones de una pista que ya cumplió su ciclo.
El sistema de retoping es, a juicio de los expertos, la única forma en la que se puede renovar física y visualmente la superficie desgastada y recuperar condiciones óptimas para entrenamientos y competencias. Es un procedimiento ampliamente utilizado cuando la base de la pista está en buen estado, pero su capa superficial ya no cumple con los estándares.
Para Los Ángeles, esta alternativa sería ideal: más rápida, menos costosa y totalmente apta para que la pista vuelva a estar certificada, dado que en la actualidad permanece sin sus credenciales, lo que implica que el recinto no puede utilizarse para futuras competiciones a nivel regional y nacional organizadas por la Fedachi.
En Chile, las pistas atléticas pueden certificarse bajo dos categorías principales: Clase 1 y Clase 2, según los estándares de World Athletics.
· Clase 1: Las pistas Clase 1 deben cumplir con estándares más exigentes en cuanto a medición topográfica, verificación de diseño y planos técnicos, pruebas de amortiguación y restitución de energía.
· Clase 2: Las pistas Clase 2 cumplen con estándares menos exigentes en comparación con las Clase 1. Estas pistas son adecuadas para competiciones de nivel regional y nacional, así como para el entrenamiento de atletas.
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