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La agrupación, que ha recorrido el sur del país llevando música, danza y color, regresa al carnaval porteño tras varios años de ausencia.
En entrevista con Diario La Tribuna Jorge Nicolás Reyes Vergara, director de la agrupación, informó que la última vez que participaron en la instancia fue en 2016 y 2017.
Su retorno, indicaron, no solo significa un nuevo desafío artístico, sino también un reconocimiento al esfuerzo de una organización comunitaria que ha crecido a pulso desde el Biobío para posicionarse como referente cultural.
Para su director, Jorge Nicolás Reyes Vergara, volver a este escenario nacional es una meta largamente esperada. "Mover una agrupación tan grande como la nuestra no es fácil: hay que cubrir transporte, alimentación, alojamiento. Pero gracias al esfuerzo colectivo, a beneficios y rifas, logramos organizarnos. Para nosotros es un orgullo representar a Quilleco, a Los Ángeles y a toda la región del Biobío", comentó.
El Carnaval Mil Tambores es reconocido por reunir a miles de artistas, músicos, comparsas y colectivos culturales de todo Chile, convirtiéndose en una plataforma clave para mostrar diversidad cultural.
Awkan Kuyen nació hace más de una década en Quilleco, impulsada por jóvenes con ganas de llevar el espíritu del carnaval a cada rincón de la provincia.
Con el tiempo, su propuesta ha crecido y hoy cuentan con una logística organizada, una directiva activa y un equipo disciplinado que se prepara meses para cada presentación.
El 2025 ha sido un año especial para la agrupación ya que en enero celebraron diez años de historia con su propio carnaval en Quilleco, que logró una alta convocatoria y consolidó su rol como uno de los colectivos culturales más importantes del Biobío.
Awkan Kuyen no es solo una batucada, sino forma parte de un espacio de encuentro comunitario donde niños, jóvenes y adultos aprenden no solo percusión y danza, sino también trabajo en equipo, compromiso y gestión cultural.
La agrupación se ha convertido en un motor para revitalizar la vida cultural en comunas rurales como Quilleco, donde este tipo de iniciativas no siempre cuentan con apoyo constante.
El desafío de viajar a Valparaíso simboliza también el esfuerzo de descentralizar el arte y abrir más oportunidades a artistas del sur.
Con instrumentos propios, vestuarios llamativos y una propuesta creativa, Awkan Kuyen aspira a seguir creciendo y consolidarse como un referente cultural no solo del Biobío, sino del país.
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