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Nikolás vive cons sus padres en Misque en la comuna de Yumbel. / cedida

Nikolás necesita $10 millones para operarse y cumplir su sueño de ser futbolista

por Claudia Robles Maragaño

En 2022 sus padres recibieron el diagnóstico tras diversos exámenes médicos, que alertaron sobre un tumor cerebral de siete centímetros.


Hace un año la vida de familia Jofré Rubilar sufrió un brusco cambio, al conocerse los resultados de los exámenes médicos realizados a Nikolás de 12 años, quien fue diagnosticado con un tumor cerebral de siete centímetros. En ese escenario no había más alternativa que una intervención quirúrgica de extrema urgencia.

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Nikolás, quien vive con sus padres, Armando y Juana, y su hermana, Emilia en el sector de Misque, a unos 10 kilómetros de Yumbel, tiene claro que su rutina se vio alterada, y que su pasión por el fútbol, por ahora deberá esperar.

"Fui diagnosticado con un tumor cerebral de siete centímetros con el cual los médicos no tenían mucha esperanza por cómo era mi caso" relató Nikolás.

A ello agregó que por las características del tumor, "mi operación se programó de la manera más rápida posible y gracias a Dios fue realizada con mucho éxito. Los médicos lo llamaron un milagro, ya que de todas las cosas negativas que podían resultar de la operación por el tamaño del tumor salió todo bien".

 "A los seis meses, cuando me realicé la primera resonancia luego de mi operación, se encontró un nuevo tumor con un tamaño pequeño ubicado en el seno sagital superior del cerebro el cual no tiene operación, y de momento los médicos indican que es una bomba de tiempo para la cual se debe estar preparado ya que el tumor requiere de radioterapia o radiocirugía según sea la urgencia".

explica Juana Rubilar, su mamá.

Nikolás reconoce que su familia agota todos los medios para reunir una alta suma de dinero para costear una nueva intervención quirúrgica,  "mis papás se encuentran constantemente realizando rifas para costear gastos médicos y traslados que me voy realizando para ver mi estado y si se presenta una urgencia".

Este jueves, la familia viajará a Santiago, donde se realizará una nueva evaluación de salud a Nikolás, quien será llevado al Hospital Militar, que cuenta con la tecnología necesaria para esta nueva etapa del proceso médico.

NIKOLÁS Y SU FAMILIA

Juana Rubilar, mamá de Nikolás, expresa que no han sido meses difíciles y de incertidumbre.    

Cómo familia, ¿cómo asumen el diagnóstico?

No ha sido fácil ya que tanto para Nikolás, como para la familia, las cosas han cambiado de una forma muy brusca, porque hemos visto como un niño tan feliz ha tenido que cambiar su estilo de vida. Hemos visto cómo él se va desanimando al ver que tiene que ir dejando de lado uno de sus más grandes sueños: El ser futbolista ya que piensa que no podrá lograrlo.

A nosotros como familia se nos ha hecho muy difícil ya que tenemos otra hija de seis años, que comprende todo lo que está sucediendo y le afecta emocionalmente, igual que a Nikolás y a nosotros, como sus padres.

¿Cómo se desarrolla la rutina de su hijo?

Nikolás en este momento se encuentra haciendo su vida normal pero con algunas restricciones en cuanto al deporte y pantallas ya que vive con una bomba de tiempo en su cabeza que, en cualquier momento, dará síntomas que nos harán acudir con mucha rapidez a un hospital ya que con el primer tumor que se le detectó, y que ya fue operado, al poco dio nuevos síntomas. Ya con el primero todo se realizó de la manera más rápida posible.

¿Cómo están como familia?

Estamos como una familia llena de sueños y esperanzas, viendo crecer a nuestros niños y disfrutando cada día con ellos ya que no sabemos qué puede pasar a futuro.

¿Por qué necesitan reunir 10 millones de pesos?

Porque Nicolás tiene un tumor seno saguital superior, eso es sobre la vena principal de su cerebro. El tumor se llama Meningioma Benigno. El Hospital Regional de Concepción no tiene otra alternativa porque existe la radioterapia, pero como es benigno a él no se lo pueden hacer. Entonces la única solución para él es una radiocirugía y esa no la hacen en los hospitales públicos, solamente en forma particular.

En ese sentido explicó que "al no tener otro tratamiento por el hospital, hay que esperar que su tumor crezca más y si eso se revienta, le puede ocurrir un derrame cerebral. Entonces nosotros no queremos llegar a eso con nuestro pequeño".

En ese sentido, manifestó que "el hospital no puede intervenir nada antes de que su tumor ya tenga un tamaño que ya esté presionando su vena y le cause daño, que el daño que le puede causar es un derrame. Ahí, recién ellos pueden actuar. Antes nada, solo una radiocirugía, y el hospital no hace ese tratamiento".

VIAJE DE YUMBEL A SANTIAGO

La familia se prepara para el primer control de Nikolás en el Hospital Militar, donde se espera realizar la nueva intervención, "porque ahí están las máquinas y la empresa que hace esta radiocirugía".

Debido al alto costo de la intervención, la familia dio inicio a una campaña tendiente a reunir diez millones de pesos: "Yo, le hago un llamado a toda la gente que pueda colaborar con un granito de arena. Nikolás es un niño que tiene toda una vida por delante, tiene sueños que quiere cumplir. Es por eso que nosotros estamos pidiendo un granito de arena, una ayuda para poder lograr esa radiocirugía que él necesita".

Nicolás y su familia / cedida
Nicolás y su familia cedida

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