¿No sabes qué cenar y que sea saludable?

Carolina Betancourt, directora de la carrera de gastronomía internacional de la Universidad Santo Tomás con sede en Los Ángeles, entregó algunos consejos para todos aquellos que aún no saben qué cenar para Navidad y Año Nuevo, cuidando nuestra figura, el bolsillo, y valorando productos, en algunos casos, locales.

“Yo creo que lo más importante es ocupar lo nuestro, partiendo por el mote, con el que se puede hacer muchas cosas, se puede hacer ceviche, un mousse de forma gourmet. Generalmente la gente ocupa mucho pavo, rellenos con verduras. Pechugas de pollos rellenas, carnes al horno, las papas salteadas, papas al horno, papas rellenas. Una manera súper práctica y fácil de hacer la papa, es hacer incisiones de forma horizontal en toda la papa y poner diversas láminas de variados quesos, se tira al horno y se gratina”, comentó.

Además, añadió que “si quieren algo más bajo en calorías, puede ser la misma papa y poner quesillo con sigulet entre medio y tirarlo al horno, queda muy rico”.

Como no es necesario desembolsar grandes sumas de dinero para poder realizar una cena navideña, y también para salir de lo común, la profesional del área gourmet entrega algunos tips.

“Para salir de la palta rellena que está obsoleta, como entrada podemos dar un ceviche de champiñones. Con una bandeja de champiñones que vale 900 pesos, un poco de cebolla y variedad de morrones tenemos la entrada lista. Además, un poco de limón, aceite y sal que en la casa siempre hay. En el plato principal optaría por una pechuga de ave, con un kilo alcanzan fácilmente 4 o 5 personas, hay que abrirla o filetear, y rellenar con un mix de verduras, se envuelve en papel aluza, y se cuece durante 18 minutos desde que hierve el agua. Puede ser acompañado con arroz con cilantro, y una salsa de verdura. Postre, cualquier tipo de mouse, puede ser de huesillo o piñones, frutilla también, y eso es solo crema batida, y con 1 litro de crema, son 300 gramos de pulpa de fruta”, detalló.

Si se quiere, en un plato más elaborado, puede agregarse a la entrada champiñones y dihueñes, o un ceviche mixto de camarón/salmón, o camarón/palta. En el plato principal también se puede hacer algo más elaborado, relleno con queso philadelphia, espinacas, nueces. Se hace el mismo rollito, por los mismos 18 minutos, y se puede hacer un risotto de algo, de champiñones, verduras o camarón. De postre un cheescake con tiramisú.

PROFUNDICEMOS UN POCO EN EL AHORRO

En primer lugar un punto muy importante cuando se pretende ahorrar en cocina es antes de salir a comprar o de planificar qué comer, es mirar la despensa para ver que hay. Así se pueden penar platos utilizando ingredientes que ya se tiene en la alacena y que no hay que salir a comprar.

Una vez que se tiene un menú pensado, se debe realizar un presupuesto para ver cuánto dinero se necesita para realizarlo. Y así cuando se sale a hacer las compras se gasta en función del mismo y ni un peso de más.  

Al igual que sucede con los regalos navideños, al aproximarse la fecha, los precios de determinados alimentos y bebidas se disparan en vista de que aumenta la demanda. Por ello, comprar con tiempo es una buena solución. Sobre todo aquellos ingredientes que no se echan a perder y que se pueden conservar por largo tiempo. Por ejemplo: bebidas, frutos secos, turrones, entre otros.

Generalmente hay productos característicos de la Navidad que disparan sus precios, por ello escoger opciones alternativas puede ser una buena manera de ahorrar. Por ejemplo, en lugar de pavo, si está muy caro, puedes escoger alguna otra variedad de ave.

En general, en Navidad por temor a que no alcance, a que nadie quede con hambre, se suele comprar una gran cantidad de comida y poner en la mesa mucha variedad de platos. Y al final siempre sobra muchísima comida y luego, por varios días, se sigue comiendo lo mismo. Para evitar esto, hay que calcular bien el número de comensales y comprar en función de ello.

El ser el anfitrión no implica necesariamente que todo salga de tu bolsillo. Dividir los gastos de la cena navideña entre todos los invitados, o que cada uno lleve algo para compartir, es lo más justo y económico para todos.

Para ahorrar en la cena, lo mejor es preparar una entrada fría, un plato principal y postre. De este modo se evita tener que gastar tanto en realizar un plato principal abundante con carne, que suele ser, en general, lo más costoso. Por ejemplo: Una mesa de ensaladas y fiambres o quesos y fiambres; luego un plato principal caliente con un acompañamiento contundente y varias opciones de postre, acompañados de los típicos dulces navideños como turrones, pan dulce, o galletas navideñas.

TÍPICO CHILENO

De nada sirve planificar tus compras navideñas si esperas al último minuto para comprar. Los alimentos más consumidos en navidad pueden llegar hasta a duplicar su precio. Empieza a comprar lo que vayas a necesitar pronto y no tengas miedo de congelar la comida. Anticipa la compra de regalos y de los artículos no perecederos.

Una forma sencilla y eficaz de ahorrar dinero para estas fiestas es utilizar cupones o tarjetas de descuento. Muchos establecimientos ofrecen estas rebajas, además de facilidad de pago a los clientes que tienen tarjetas de fidelidad. Internet también es un buen lugar en el que puedes encontrar cupones de descuento.

Si deseamos que lo que comamos no nos haga sentir mal, es de vital importancia comer tranquilos, relajados, disfrutando de cada plato y, ante todo, no excediéndonos en la cantidad de raciones. La recomendación en este caso sería la siguiente: come y disfruta de todo, pero con moderación.