
Sobre esto Galli señaló que “claramente la intencionalidad era política, y claramente la intencionalidad era dañar al gobierno, por eso valorar particularmente a los senadores del PPD, Felipe Harboe, a los senadores de la DC, Jorge Pizarro y Francisco Huenchumilla que ejercieron su función de senadores, evaluaron como jurado los argumentos que estaban detrás de esta acusación constitucional y la descartaron por ser carente de fundamentos”.
El subsecretario fue enfático en señalar que “aquellas personas que están mal utilizando las acusaciones constitucional no entienden lo que significa ejercer el gobierno y ejercer el rol de ministro del Interior y de Seguridad Pública, este ministerio tiene una exigencia política y de gestión mayor”.
Finalmente puntualizó que en la cartera del Interior “estamos 100% dispuestos a que se nos evalúe de manera exigente pero no a los 30 días, no a los 80 días con el objeto de dañar políticamente“, dijo aludiendo a que el libelo se anunció a los pocos días de que el exministro Pérez asumiera el cargo, y presentado 80 días después.