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Su familia está convencida de que no se trató de un suicidio y que una de sus amigas podría estar detrás de su muerte.
Todo comenzó la madrugada del domingo, cuando Fernanda salió a carretear con dos amigas. Las tres llegaron al motel "Jardín de Eros" a eso de las 6:50 de la mañana. Pero cerca del mediodía, solo se vio salir a las dos acompañantes con las que había llegado Fernanda.
Un par de horas después, fue encontrada muerta en el jacuzzi de la habitación 18, con una sábana amarrada al cuello.
La mamá de Fernanda, Fabiola Alvarado, asegura que su hija le alcanzó a enviar audios desgarradores antes de morir.
"Me están intentando ahorcar", le dijo por WhatsApp. "Este hueón me está pegando, mamá... me está matando", se escucha en otro mensaje.
Fabiola llegó al motel tras recibir la ubicación de su hija. Pero ya era tarde. "Yo no sé qué pasó ahí, pero algo raro hay. Muchas personas le tenían mala a mi hija", afirmó.
El caso está siendo investigado por el Laboratorio de Criminalística de Carabineros (Labocar), que busca determinar si hubo participación de terceras personas.
Otra amiga de Fernanda, que ha prestado declaración, también levantó sospechas.
Dijo que ese mismo día hubo una pelea entre Fernanda y una de las chicas que la acompañaba. "Después se abuenaron, pero hubo una discusión fuerte, y según lo que sé, incluso hubo amenazas con pistola", aseguró.
La muerte de Fernanda tiene más preguntas que respuestas. Su familia insiste en que no fue un suicidio, y piden justicia para una joven que, aseguran, estaba siendo atacada por personas cercanas.
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