"Es un orgullo trabajar con mi pueblo%26quot;

El 12 de noviembre de 2014 comenzó a implementarse la Patrulla de Acercamiento a las Comunidades Indígenas (P.A.C.I) en la provincia de Bío Bío.

Se trata de un grupo de cuatro carabineros que trabajan, a diario, en estrecha relación con los pueblos originarios que habitan en Bío Bío.

La particularidad de esta patrulla es que está conformada por personas que tienen raíces -en este caso- pehuenches: tres de ellos tienen descendencia indígena.

Eso los hace más cercanos a una realidad que muchos desconocen o que no logran entender; se trata de un grupo de hombres que conocen la realidad de un pueblo y de quienes forman parte de él.

La patrulla P.A.C.I. nace en base a una iniciativa del alto mando, instaurándose en la zona bajo el alero de la Tenencia de Alto Bío Bío, emplazada en la comuna cordillerana que lleva el mismo nombre.

El suboficial mayor, Jorge Manqueo, jefe de esta patrulla, el sargento primero Arturo González, y los cabo primero Jhony Levinao y Luis Sandoval, son quienes la conforman.

“El objetivo de esta patrulla es estrechar los lazos de acercamiento entre Carabineros de Chile y las comunidades indígenas que existen en toda la provincia de Bío Bío”, explicó Manqueo.

Son 16 las comunidades indígenas repartidas en la zona, desplegadas en las localidades de Alto Bío Bío, Santa Bárbara, Mulchén, Quilaco y Negrete.

Para estrechar dichos lazos, “estamos constantemente visitando las comunidades, a las familias pehuenches de los diferentes sectores, viendo la problemática que les pueda afectar y viendo, también, algún curso de acción que se pueda desarrollar para solucionar su problema”, puntualizó Manqueo.

Son jornadas, muchas veces, extenuantes las que deben realizar todos los días ya que deben recorrer varios kilómetros antes de llegar a un determinado sector.

Sin embargo, ver la sonrisa de un niño que se alegra con su llegada o cuando les entregan una pieza de ropa usada basta para que todo cansancio desaparezca. “Nos gratifica mucho poder llevarle alegría a estas personas”, expresó el jefe de esta patrulla.

Acostumbrarse al clima, aseguran, es una de las situaciones más complejas que deben abordar. La lluvia, la nieve y el frío, sumado a lo complejo de los caminos, son parte del escenario con el que deben lidiar en invierno.

Pese a ello, “igual estamos recorriendo las comunidades y viendo las necesidades que éstas puedan tener”, puntualizó Manqueo.

Agregó que hay jornadas que deben alargarse hasta altas horas de la noche y que comenzaron muy temprano. Pese a ello, “a nosotros -que somos descendientes- nos gratifica por estar con nuestro pueblo y poder apoyarlos lo que más podamos”.

Muchos de quienes conforman la patrulla deben viajar, a diario, largas distancias para llegar a sus hogares. Es más, uno de ellos viaja cada 15 días a ver a su familia, sólo por un tema de distancia.

Provenir de familias indígenas es un tema que los ha ayudado mucho para realizar de mejor forma su trabajo ya que eso mismo genera confianza en las distintas comunidades indígenas que conforman la provincia.

Ello permite que puedan contarle sus problemas, plantearles inquietudes y alguna problemática que puedan tener tanto al interior de las comunidades en las que habitan como en el ámbito delictual o alguna otra situación particular que pueda afectarlos.

Lo que más les gusta de su trabajo es poder servir a la comunidad, algo tan característico de Carabineros de Chile.

“Para mí es un orgullo formar parte de esta patrulla, un orgullo de poder trabajar con mi pueblo y entregar todo lo que esté a la mano de mi parte para poder ir en ayuda y que les pueda servir a ellos, solucionarle algún problema y alguna situación de índole policial”, expresó Manqueo.

Como patrulla agradecieron el incondicional apoyo recibido por parte del alto mando de la Institución, el que ha sido fundamental. Es ese mismo apoyo recibido el que les ha permitido lograr el éxito que han tenido al interior de las comunidades.