Opinión

El valor de lo inútil

ALEJANDRO-MEGE-4,
ALEJANDRO-MEGE-4 / FUENTE:
"Transformando a los hombres en mercancías, este perverso mecanismo económico ha dado vida a un monstruo, sin patria y sin piedad, que acabará negando también a las futuras generaciones toda forma de esperanza."  

Nuccio Ordine.

El 10 de junio de este año, falleció el pensador, escritor y ensayista italiano Nuccio Ordine a los 64 años de edad, autor de numerosos libros que han sido traducidos a 24 idiomas, obras en las que destaca y defiende la formación humanista en contraposición a la apabullante lógica del utilitarismo y del mercado que condiciona la vida del ser humano. Ordine recibió importantes premios y reconocimientos de muchos organismos e instituciones a nivel mundial, como ocurrió en Chile, donde estuvo varias veces, siendo su libro "La utilidad de lo inútil" el más conocido, en el que denuncia el daño que el utilitarismo actual, provoca en la escuela, la universidad o en la investigación. Libro que, sólo en su versión española, ha sido reeditado 28 veces. De modesto origen, nacido en Calabria, Italia, tenía plena consciencia  que la educación permite a  una persona alcanzar su sueño cuando, aún con pocas o ninguna oportunidad,  se lo propone.  En una entrevista reconoció la experiencia de su propia vida: "Nacer en una casa sin libros y de padres que no estudiaban, vivir en una pequeña ciudad del sur sin librerías ni bibliotecas, sin teatros ni espacios culturales, no significa estar condenado a la ignorancia". Defendía la importancia que tienen para el ser humano los valores los que, en muchos lugares del mundo, sino en todos, incluido Chile, son considerados saberes inútiles y que solo es útil lo que produce beneficios materiales. "En el universo del utilitarismo-expresa-en efecto, un martillo vale más que una sinfonía, un cuchillo más que una poesía, una llave inglesa más que un cuadro: porque es fácil hacerse cargo de la eficacia de un utensilio mientras que resulta cada vez más difícil entender para qué sirve la música, la literatura, el arte". Al fundamentar su decisión, el jurado que le entregó el Premio "Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades" 2023- que no alcanzó a recibir- expresa: "La utilidad de la educación se ha de entender en términos de pasión por la búsqueda del conocimiento y de lo mejor de cada persona sin circunscribirse a un interés económico." Reclama que a las disciplinas humanistas se las considera inútiles y no tienen espacio en los programas escolares. "¿Para qué gastar dinero en actividades que no aportan de manera rápida y concreta rendimiento económico?". De esta manera, la exageración de lo útil ha llegado, incluso a corromper las relaciones sociales y los afectos más íntimo de las personas. Situación que ha conducido, por la obsesión de los resultados, a transformar las escuelas, liceos e instituciones de educación superior en empresas y a los estudiantes en clientes.

Con dos días de diferencia han muerto en Italia dos personajes que ilustran lo que se considera  inútil en la educación y lo útil en la economía; lo inútil de  los valores humanos y lo útil del mercado. Nuccio Ordine, falleció el 10 de junio de 2023 y Silvio Berlusconi, el 12 del mismo mes y año. El primero, humanista, conferencista, educador, escritor, distinguido con un centenar de premios, diplomas y doctorados "honoris causa" de varias universidades, divulgador y defensor de los valores éticos que hacen a las personas seres verdaderamente humanos. El segundo, un político (fallecido a los 87 años) que gravitó por muchos años en la vida de la sociedad italiana, exitoso empresario, magnate de los medios de comunicación, poseedor de una gran fortuna pero, al mismo tiempo, condenado por la Corte Suprema de su país por delitos de fraude al fisco, corrupción y prostitución de menores, genuino representante del utilitarismo y del mercado.

El impacto con que fue recibida la muerte de ambos, no solo en Italia, también en el mundo, demuestra  cuál de las visiones de sociedad y de vida que sustentaba cada uno, es la que predomina en las sociedades de hoy. Y, cada uno de nosotros tendrá al respecto, su propia posición.

Alejandro Mege Valdebenito.

Etiquetas:




matomo