La educación en la comisión de expertos

Alejandro Mege Valdebenito

¿Por qué la sociedad se siente responsable solo por la educación de los niños, y no para la educación de todos los adultos de todas las edades? Erich Fromm.

En la elaboración de la propuesta que sobre educación, como parte de la Nueva Constitución (esperando que estas vez sí se logre), debe redactar y proponer la Comisión de Expertos se inicia reconociendo la profunda crisis que vive la educación chilena desde hace muchos años y considera que la gran pregunta a la que hay que  responder es: qué es educación y quien debe proteger el derecho a la educación y qué sociedad y tipo de seres humanos son los que se busca formar como sociedad, más cuando existe una definida inclinación a homogeneizar la cultura y donde la libertad de enseñanza es entendida como la libertad para hacer negocios con la educación. Las diferentes reformas educacionales que ha tenido nuestro país, desde la gran reforma de 1928 hasta la de 1981 han tenido como finalidad declarada mejorar la calidad de la educación, entendida calidad como lograr el máximo aprendizaje de los alumnos a través de la acumulación de conocimientos priorizando el desarrollo y la adquisición de habilidades cognitivas, la memorización y reproducción de contenidos  sin la necesaria  consideración de la dimensión socioemocional inherente al ser persona, convirtiendo la mal llamada calidad educativa en una competencia por la obtención de resultados cuantitativos a costa de profundizar las diferencias sociales donde la cuna, la clase social, el tipo de educación recibida afectan fuertemente las posibilidades de crecimiento y desarrollo de los sectores estudiantiles más vulnerables.

Sin duda que para hablar de educación y reconocer sus atributos como el medio más importante que permite el completo desarrollo humano sobre la cual se construye y se sostiene todo el andamiaje de la vida en sociedad se debe tener mediana claridad de lo que  significa educación  para que sea reconocido y asumido como una tarea a cumplir por el mundo social y si bien existen diferentes interpretaciones sobre el concepto, la definición que debe servir de base en la discusión es la que se hace en el art. 2° de la Ley General de Educación del año 2009, que establece: "La educación es el proceso de aprendizaje permanente que abarca las distintas etapas de la vida de las personas y que tiene por finalidad alcanzar su desarrollo espiritual, ético, moral, afectivo, intelectual, artístico y físico, mediante la trasmisión y el cultivo de valores, conocimientos y destrezas. Se enmarca en el respeto y valoración de los derechos humanos y de las libertades fundamentales, de la libertad multicultural y de la paz, y de nuestra identidad nacional, capacitando a las personas para conducir su vida en forma plena, para convivir y participar en forma responsable, tolerante y solidaria, democrática y activa en la comunidad, y para trabajar y contribuir al desarrollo del país". Definición que establece con nítidos perfiles el tipo de persona y de sociedad que se considera mejor. Si una educación con esas características hubiera sido la que debieron recibir las nuevas generaciones  es posible que los graves problemas y conflictos sociales o no habrían ocurrido o su acontecer habría menos agresivo, violento, dramático y desolador, con menos dolor y lágrimas derramadas, con menos esperanzas frustradas, bienes y vidas humanas destruídas.

Garantizar y proteger el derecho a una educación de calidad integral, como la descrita, para lograr la formación del ser humano ética y cívicamente habilitado para construir una sociedad democrática, solidaria y comprometida  con su destino, es responsabilidad del Estado y también de la sociedad civil que esté dispuesta a contribuir con la educación dentro de las normas que el Estado, en representación de la sociedad establezca y supervise.

Alejandro Mege Valdebenito.

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