Con el propósito de orientar e informar a los consumidores que están pensando realizar una compra o pedir un avance en efectivo con sus tarjetas de crédito para financiar los gastos de fin de año, el Sernac realizó un nuevo estudio.

El análisis incluyó a 16 entidades bancarias, 15 del retail y una cooperativa de ahorro y crédito. Para la investigación se consideraron datos vigentes entre el 6 al 30 de noviembre.

El estudio comparó el Costo Total del Crédito en el caso de que el consumidor opte por realizar un avance en efectivo o una compra con la tarjeta de crédito por un monto de $200 mil en 12 cuotas.

El análisis concluyó que al pedir un avance, una persona podría pagar desde $212.210 hasta $453.796, esto es, una diferencia de un 114% o de $241.586 entre la alternativa más barata y la más cara.

Al comprar con tarjeta, una persona podría terminar pagando desde $205.774 hasta $350.429, es decir, una diferencia de 70% o un $144.655 entre el menor valor y el más alto.

Al comparar sus costos mínimos y máximos totales, este estudio permite concluir que resulta más económico realizar una compra con tarjeta que efectuar un avance en efectivo.

Como es sabido, ningún crédito es gratis, por lo que es importante evaluar la capacidad de pago antes de endeudarse y así evitar el sobreendeudamiento, caer en mora y todas las consecuencias que conlleva el retardo en el pago de compromisos financieros, como por ejemplo los llamados de cobranza extrajudicial y el cobro de intereses, entre otros.

Por otro lado, es relevante tomar en cuenta que la Ley de Protección de los Derechos de los Consumidores (LPC), establece una serie de derechos e incluye herramientas que les permiten a las personas cotizar adecuadamente y saber de antemano cuánto terminarán pagando.

En caso de acceder a un crédito, es aconsejable solicitar una cotización y compararla con la institución de al lado. La Ley dispone que esta valoración tiene una vigencia de un período mínimo de 7 días hábiles.

Asimismo, las empresas financieras deben entregar a los consumidores una hoja de resumen, la que tiene un formato estándar y debe ir en la primera carilla del contrato y de las cotizaciones. Debe indicar el costo total del crédito y todos los gastos o cargos asociados al crédito que el consumidor está solicitando, entre otros aspectos relevantes.

También es importante fijarse en el Costo Total del Crédito, que es el monto total que se debe asumir y que corresponde a la suma de todos los pagos periódicos definidos como valor de la cuota en función del plazo acordado, incluyendo cualquier pago en el periodo inicial.

En caso de optar por alguna tarjeta de crédito, es recomendable pagar con una sola de ellas y concentrarlas en una sola transacción, pues de esta manera ahorra en el pago de comisiones.

Antes de comprar verifique con la institución emisora de la tarjeta o con el comercio si existen promociones u ofertas, como compras en cuotas a precio contado o sin interés ni comisiones, ya que podría encontrar condiciones más ventajosas.

Juan Pablo Pinto.

Director Regional del Sernac

Región del Biobío