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En la última fecha de la Liga Rural de Los Ángeles, donde se enfrentaron los equipos Club O’Higgins y Santa Fe, tras el término del encuentro, los asistentes, comenzaron a consumir alcohol desproporcionadamente, hasta provocar desmanes que concluyeron en una batalla campal entre ambas barras.
La pelea se salió de control, cuando un individuo perteneciente a la barra del Club Santa Fe, subió a su auto y atropelló a un hincha del Club O’Higgins, el cual tuvo que ser llevado de urgencia al hospital de Los Ángeles.
Tras la gresca, el asesor del directorio, presidente de la comisión de disciplina, José San Martín, comentó que la violencia se castiga duramente aseverando "nosotros no le damos ninguna pasada a las agresiones, el equipo que infrinja las normas, tendrá sanciones durísimas".
Además sentenció que "utilizaremos todo el rigor de las normas, en especial las que establecen expulsar a los clubes de por vida, cuando hay personas de los equipos involucradas en actos de extrema violencia".
Para aclarar la situación, se citó a los presidentes de los equipos involucrados en las instalaciones de la unión comunal, para que explicaran los acontecimientos.
Las autoridades del Club Santa Fe y O’Higgins, aseguraron que fueron sólo particulares que se quedaron en la cancha después del encuentro bebiendo vino, protagonizando la pelea y, uno de ellos atropello con su auto al hincha del equipo rival.
De todas formas, desde la unión rural aseguraron que tomarán sanciones en contra de los que protagonizaron la batalla dentro de los próximos días, pero como no participaron los jugadores, el castigo será menor.
