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La Tribuna

Dos alumnas de Los Ángeles crearon premiada alternativa sustentable para reemplazar el plástico

por Nicolás Maureira

Florencia Ortiz y Fernanda Ortega, estudiantes del Liceo Coeducacional Santa María, lograron este prestigioso reconocimiento con un modelo prototipo basado en el micelio del hongo ostra, un material que proyectan como sustituto parcial para objetos rígidos y como aislante ecológico ante el plumavit.

Las estudiantes Florencia Ortiz y Fernanda Ortega, del Liceo Coeducacional Santa María, presentaron su innovador modelo prototipo de micomateriales en el Congreso Provincial de Ciencia, Tecnología e Innovación Escolar. / Cedida

¿Sabía usted que el micelio, esa red subterránea de raíces fúngicas que a menudo pasa desapercibida, podría ser la clave para reemplazar los contaminantes plásticos y el poliestireno expandido, conocido como plumavit?

Dos estudiantes de tercero medio del Liceo Coeducacional Santa María de Los Ángeles han transformado esta visión en una realidad científica de alto impacto: el proyecto "El arte del micomaterial: diseño de un panel biodegradable a base de micelio de hongo ostra".

Tras un riguroso trabajo que se extendió por aproximadamente un año, el proyecto, desarrollado por las alumnas Florencia Ortiz Artiaga y Fernanda Ortega Pérez, junto a su docente Daniel Vargas Gallardo, logró un hito significativo al obtener el segundo lugar en la Feria Nacional de Ciencia y Tecnología de la Universidad del Biobío (UBB) en Concepción.

Este éxito nacional, alcanzado la primera semana de octubre, fue seguido por la presentación de su innovadora propuesta en su propia ciudad, durante el Congreso Provincial de Ciencia, Tecnología e Innovación Escolar de Los Ángeles.

¿QUÉ ES EL MICELIO Y CÓMO SE CONVIERTE EN "MICOMATERIAL"?

El proyecto se centra en el micelio de un hongo específico: el hongo ostra. El profesor Daniel Vargas, docente de Ciencias Naturales y Biología en el liceo, explica que el micelio corresponde a "las subterráneas que nosotros no vemos de los hongos". Al utilizar estas raíces, las estudiantes crearon un modelo prototipo de paneles biodegradables para reemplazar los plásticos, con la meta de desarrollar un material sustentable.

Vargas destaca que esta iniciativa se enmarca en una tendencia global:

"Estos micomateriales a nivel industrial y mundial se están ocupando". El docente añade que, aunque a nivel país se está yendo "un poquito más lento", a escala internacional el micelio ya se emplea incluso para "construcción" y podría utilizarse en la práctica para la fabricación de diversos artículos, desde "ropa, sillas, mesas y maceteros".

Daniel Vargas.

TEORÍA Y APLICACIONES

La utilidad del proyecto, más allá de la creación de objetos rígidos, apunta a soluciones medioambientales concretas. Fernanda Ortega, una de las alumnas a cargo de la parte teórica de la investigación, enfatiza el potencial ecológico del trabajo.

"Nosotros pensamos que los micomateriales podrían llegar a ser una alternativa sustentable a lo que es el plástico, principalmente como un aislante", explica Ortega. Añade que una de sus proyecciones principales es su uso térmico en construcciones o como "un sustituto al plumavit".

Fernanda Ortega.

LA METODOLOGÍA DETRÁS DEL PANEL BIODEGRADABLE

El desarrollo práctico del proyecto recayó en Florencia Ortiz, quien se dedicó a la parte metodológica. Aunque admite que el proceso es "un poco estresante", señala que es "divertido" y algo que le gusta hacer.

Ortiz detalló la compleja cadena de pasos para obtener el micomaterial.

"Nosotros fuimos al bosque a buscar el hongo, lo extrajimos y lo cultivamos en una placa de Petri. Después eso se pasó a un medio de cultivo líquido y después a otro con un sustrato. En este caso utilizamos el trigo y, después eso, se mezcló con otro sustrato como el aserrín y se compactó en el molde con el que queríamos lograr tener la forma", explicó.

Florencia Ortiz.

La capacidad de moldear el micelio bajo condiciones controladas fue una conclusión favorable y confirmó su potencial como biomaterial.

Segundo lugar en feria nacional de la UBB

Las jóvenes del Liceo Coeducacional brillaron en la 27ª Feria Nacional de la Ciencia y Tecnología de la UBB, un evento que se desarrolló del 30 de septiembre al 3 de octubre y que convocó a más de 70 proyectos de todo Chile.

Un hito para Los Ángeles: el proyecto de las alumnas obtuvo el segundo lugar en la Feria Nacional de Ciencia y Tecnología de la UBB en Concepción.  / Cedida
Un hito para Los Ángeles: el proyecto de las alumnas obtuvo el segundo lugar en la Feria Nacional de Ciencia y Tecnología de la UBB en Concepción. Cedida

La propuesta de crear un modelo prototípico basado en micelio les valió el segundo lugar y confirmó que este biomaterial tiene un potencial significativo para ser utilizado como "sustituto parcial del plástico, especialmente en objetos rígidos de uso cotidiano", según indica la conclusión final del trabajo.

Para Florencia Ortiz, fue "bonito haber vivido esa experiencia". Por su parte, Fernanda Ortega expresó su profundo agradecimiento de poder "participar en estas instancias". A su juicio, es "muy bueno para nosotros como estudiantes expandirnos en lo que nos gusta y poder crear cosas también que le gusten a la gente y que puedan ser un cambio en la comunidad en general".

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