Freno a la calidad de vida

Desde el 2011 se viene realizando el Índice de Calidad de Vida Urbana, elaborado por el Instituto de Estudios Urbanos y Territoriales de la Pontificia Universidad Católica de Chile y la Cámara Chilena de la Construcción, la cual evalúa a 99 ciudades del país respecto de las condiciones laborales, ambiente de negocios, condiciones socioculturales, conectividad y movilidad, salud y medioambiente y vivienda.

La única urbe de la provincia que califica para dicho estudio es la comuna de Los Angeles la cual, a su vez, está encasillada dentro de categoría de ciudades de tamaño intermedio, es decir, cuya población no supera los 250 mil habitantes, las cuales suman 26 a nivel país

El último ICVU reportó que la capital provincial tiene un índice de calidad de vida urbana medio-bajo, con mejoras en los ítems de Vivienda y Entorno, Condiciones Laborales, y Ambiente de Negocios. Es decir, parafraseando la terminología futbolera, se encuentra en la medianía de la tabla.

De las 26 comunas evaluadas, dos presentan un nivel alto de calidad de vida urbana, otras dos un nivel medio-alto, 11 un nivel medio-bajo (dentro de las cuales está Los Ángeles) y 11 un nivel bajo.

Sin embargo, para una mejorar valoración de los datos, es necesario observarlos desde una perspectiva más amplia. Cuando el estudio se inició en 2011, la capital provincial se situaba en el tercio inferior, es decir, dentro del nivel más bajo.

La revisión de la información en estos 12 informes sobre calidad de vida urbana permite observar que, aunque el proceso ha sido lento - quizás más lento de lo que se esperaría-, Los Ángeles ha ido mejorando en cada uno de los parámetros tomados en cuenta en la evaluación.

Sin embargo, tal como lo dijo el doctor en Geografía Humana y jefe de gestión Académica del Doctorado en Arquitectura y Estudios de la Pontificia Universidad Católica de Chile, Arturo Orellana, aunque la situación actual de la capital de Biobío está en el mismo nivel de Chillán y Temuco, hay tres aspectos que conspiran para que, a futuro, se pueda producir un mejoramiento más sustantivo en la calidad de vida de la población.

Estos se refieren a que Los Ángeles tiene una realidad metropolitana, (dado que lo que puede acontecer en la ciudad ciertamente que repercute en el devenir de los habitantes de las comunas vecinas que buscan atención de salud, trámites o compras), condición que ha sido reconocida pero que no ha sido asumida en toda su dimensión.

Por otro lado, como no tiene la condición de capital regional, no tiene el peso político necesario para que la toma de decisiones, como sí sucede con Chillán y Temuco. Además, muy ligado a lo anterior, es que el nivel de centralismo sigue siendo mayúsculo, al punto que las decisiones más relevantes se siguen tomando en la capital nacional, muy lejos de los territorios en los cuales impacta.

Estudios de ese tipo son una fotografía del momento que permite observar los cambios, tener claridad sobre los avances y retrocesos, logros y contratiempos. Sin embargo, los temas más de fondo que planteaba el experto están presentes y seguirán conspirando para que la ciudad mejore de manera sustantiva en las condiciones de vida para la población, no solo comunal, sino que provincial.