Libros y niños

El Día del Libro se instauró el 23 de abril en honor al fallecimiento de tres grandes escritores de la literatura mundial: William Shakespeare, Miguel de Cervantes y Garcilaso de la Vega. Los tres fallecieron en la misma fecha, aunque en años diferentes: Shakespeare y Cervantes en 1616, y Garcilaso de la Vega en 1536.

El Día del Libro fue proclamado por la Unesco en 1995 cuyo fin es objetivo fomentar la lectura, la industria editorial y la protección de la propiedad intelectual. Básicamente, se promueve la cultura escrita y a la importancia de los libros como herramienta para el conocimiento y el aprendizaje.

Nadie discute que la lectura es una habilidad fundamental y una de las herramientas más importantes que se pueden adquirir. La lectura no solo nos permite adquirir conocimientos, sino que también puede mejorar nuestro vocabulario, habilidades de comunicación, pensamiento crítico, imaginación y creatividad.

Es especialmente importante incentivar la lectura en los niños, ya que puede tener un impacto relevante en su desarrollo cognitivo, social y emocional. Al leer, los niños pueden aprender nuevas palabras, mejorar su comprensión del lenguaje y desarrollar habilidades lingüísticas importantes.

Además, la lectura puede fomentar la imaginación y la creatividad, ayudar a los niños a desarrollar habilidades de pensamiento crítico y proporcionar una comprensión más profunda del mundo que les rodea. Los niños que leen con regularidad también pueden tener mejores habilidades de comunicación y pueden ser más capaces de expresar sus ideas y sentimientos.

También, la lectura también puede ser una actividad muy agradable y relajante para los niños, lo que les permite desconectar de la tecnología y el mundo digital, y sumergirse en un mundo de aventuras y fantasía. En general, incentivar la lectura en los niños puede tener muchos beneficios duraderos en su vida.

Por lo mismo, es fundamental incentivar la lectura en los niños. Algunas sugerencias son dedicarle tiempo a leer con los niños, especialmente cuando son pequeños. Puede leerles cuentos y libros de imágenes para que se interesen por los libros. A medida que crezcan, pueden ir eligiendo los libros que les gustan y leerlos juntos.

Hay que dejarlos explorar diferentes temas y géneros para que encuentren lo que más les gusta. Si les interesa un tema en particular, como los dinosaurios o los animales, buscar libros relacionados con ese tema y animarlos a leerlos.

También ayuda llevar a los niños a la biblioteca o a la librería local para explicarles cómo funcionan esos lugares y animarlos a elegir los títulos que les interesen.

Sin duda que lo más importantes es hacer de la lectura un hábito, estableciendo un momento del día para que los niños lean. Puede ser antes de dormir, durante el fin de semana o en cualquier otro momento que funcione para ellos. Es importante que lo vean como algo divertido y no como una obligación.

Al cabo, la a lectura es un hábito que se cultiva desde temprana edad. Incentivarla en los niños puede ayudarles a desarrollar habilidades importantes para su vida y a fomentar su amor por la literatura y el conocimiento.