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La Operación Renta 2023 está en marcha y, como todos los años, es importante que los contribuyentes declaren sus ingresos de manera correcta para evitar multas y observaciones por parte del Servicio de Impuestos Internos (SII). En este sentido, Diego Plaza, analista financiero tributario de Maxxa, fintech de servicios financieros para pymes, entrega algunos consejos para las pymes en caso de cometer errores en su declaración de impuestos.

Según Plaza, existen errores básicos que no implican sanciones, como los de digitación en el RUT o datos personales, en la información de retenciones y en los ingresos no afectos a impuestos. Sin embargo, hay equivocaciones que pueden generar multas, que varían entre 1% y 50% del impuesto no pagado o pagado de manera incorrecta, según la gravedad y la reincidencia de la infracción. Por lo tanto, es importante rectificar estos datos a tiempo dentro de los plazos establecidos mientras aún la renta no ha sido procesada por SII.

Respecto a las correcciones, Plaza afirma que algunas representan reparos por parte de SII, por lo que es importante considerar aspectos como la variación en la utilidad de la empresa, en la renta de los socios o una disminución en el pago de impuestos. Además, si la modificación implica un incremento en el monto de impuestos a pagar, se deberá pagar la diferencia correspondiente y, en algunos casos, se podrían generar intereses y multas si ésta se realiza fuera de plazo. Por otra parte, si la corrección es una disminución en el monto de impuestos, el contribuyente puede recibir una devolución correspondiente al excedente y, en este caso, es primordial hacer la solicitud a través de una petición administrativa o de manera presencial en el SII.

Es importante tener en cuenta que si la declaración queda observada y no se puede corregir en el plazo oficial, las modificaciones se tendrán que realizar aproximadamente desde la primera quincena de junio. En caso de que el error sea detectado por el SII antes de la corrección del contribuyente, este se arriesga a sanciones más severas, como multas por infracciones tributarias o acciones penales. Por lo tanto, es fundamental que las pymes cuenten con asesoría para mantener su situación financiera y tributaria ordenada, ya sea contratando a un contador o utilizando herramientas digitales que les permitan facilitar la gestión de sus finanzas.