Descubre el encanto atemporal del "Old Town" de Tallin

Tallin, es la capital de Estonia, y unas de las ciudades más atractivas para visitar debido a su cultura y el encanto de remontarse a épocas pasadas caminando por el "Old Town" o bien llamada "Ciudad Vieja", localidad inmersa dentro de la capital estoniana que esconde un rico viaje hacia siglos pasados, colmados de cultura, arquitectura, comidas típicas, entre otros.

Ubicada en la costa sur del Golfo de Finlandia, la encantadora ciudad de Tallin en Estonia atrae a los viajeros con su encanto atemporal y su rica herencia histórica. En el corazón de esta joya báltica se encuentra el "Old Town" o ciudad vieja si lo llevamos al español, un cautivador cúmulo de laberintos de calles empedradas que llegan siempre al centro de la ciudad misma, además de arquitectura medieval y una atmósfera vibrante que transporta a los visitantes a siglos pasados. A continuación, profundizaremos sobre el encanto del casco antiguo de la ciudad de Tallin, destacando su historia, significado cultural y diversos puntos de visita obligada en dicha locación histórica.

Antecedentes históricos

El casco antiguo de Tallin, conocido como "Vanalinn" en estonio, es un sitio del Patrimonio Mundial de la UNESCO y una de las principales ciudades medievales de Europa, destacan por sobre otras locaciones sin lugar a duda su conservación hasta estos días, además del cuidado de las obras arquitectónicas y sus bellos parajes. Sus orígenes se remontan al siglo XIII cuando los invasores daneses después de una ardua batalla establecieron una fortaleza en la colina de Toompea. A lo largo de los siglos, la ubicación estratégica de Tallin ayudo al desarrollo de rutas comerciales asegurando su importancia geográfica como una ciudad hanseática (antigua confederación de ciudades alemanas para seguridad y fomento de su comercio) de gran flujo de población fomentando el intercambio cultural y la prosperidad de aquellos habitantes en de ese entonces.

Ambiente encantador

Al pasear por las calles empedradas del casco antiguo de Tallin, es como entrar en un cuento de hadas, el ambiente insta a remontarte en siglos pasado y a poder observar desde otra mirada el lugar en el cual estas inmerso. El "Old Town" en su conjunto emana un ambiente cálido y acogedor, con pintorescos cafés, tiendas artesanales y mercados de artesanías locales que bordean los callejones, siempre teniendo total cuidado en no perder el sentido de pertenencia y de ninguna manera haciendo que salgas del cuento de hadas en el cual has ingresado desde el primer paso dentro de las murallas. La ausencia de edificios modernos de gran altura, tecnología en pos de turista, desplazamientos en vehículos ya sean eléctricos y/o convencionales permite a los visitantes sumergirse por completo en el encanto medieval de la ciudad, dejando de lado la vida cotidiana de cada uno de los turistas que llegan hasta dicha locación.

Delicias Culturales

El casco histórico de la ciudad de Tallin es un tesoro de experiencias culturales. Los visitantes pueden explorar diversos museos, como el Museo de Historia de Estonia inaugurado en 1987, retoma el recorrido de su homólogo de mediados del siglo XIX para cubrir las convulsiones políticas y sociales del siglo XX, sus exhibiciones incluyen maniquíes vestidos históricamente y recreaciones de interiores domésticos.

Las décadas de 1940 y 1950 están representadas por uniformes y armas del ejército. Además, la ciudad alberga numerosos festivales, tales como los Días del casco antiguo de Tallin donde la festividad gira entorno a los días de gloria del casco histórico de Tallin, además del Mercado de Navidad festividad que ha sido elegida en varias ocasiones como una atmosfera perfecta para poder desarrollar una mágica navidad en familia, ya sea por su colorida fiesta mezclada con la estación de invierno sumando a esto los mágicos caminos y parajes de3 siglos anteriores, ambas festividades ofrecen un vistazo a las tradiciones culturales y celebraciones nacionales de Estonia.

Jornada Gastronómica

La cocina estonia es una deliciosa fusión de influencias bálticas, escandinavas y rusas todo esto resultado de su intercambio cultural que se estableció en su actual locación geográfica. El casco antiguo está repleto de restaurantes, cafés y tabernas que ofrecen platos tradicionales como morcilla (verivorst), anguila marinada (marineeritud angryjas) y chucrut (hapukapsas), preparaciones tradicionales y muy arraigadas en la cultura estonia. Para complementar la experiencia, el "Old Town" ofrece cervezas artesanales, además de licores locales con infusión de enebro (planta medicinal que sirve para tratar varios problemas de salud, en especial afecciones del estómago y de la piel, inflamación e infecciones urinarias, debido a que los frutos, también conocidos como bayas de enebro son ricos en aceites como el mirceno y el cineol (eucaliptol), además de vitamina c), se suman a la autenticidad de la comida y brebajes Estonios por excelencia.

Testimonio vivo de la historia

El "Old Town" emerge como un testimonio vivo de la historia y el perdurable en el tiempo que llega a ser este patrimonio cultural de Estonia y de igual manera de las nacionales bálticas que se encuentran a su alrededor. Con su cautivadora arquitectura que nos ambienta de manera real y mágica a siglos anteriores sin tener que acudir a la tecnología como herramienta para poder apreciar y empaparnos de la cultura Estonia, un ambiente encantador que nos remonta a pasajes donde la naturaleza no ha sido atacada ni dejada de lado sino que cuidades que se establecen en armonía a su alrededor, además de delicias culinarias que nos transportan y nos hacen participe en primera persona de vivir la experiencia de habitar en siglos anteriores en su plenitud. Esta joya medieval ofrece a los viajeros un viaje inolvidable en el tiempo, una visita al casco histórico de Tallin no es solo una exploración del pasado, sino también una celebración del presente vibrante y el futuro prometedor de la nación. Ya sea paseando por sus encantadoras calles o maravillándose con su arquitectura, este cautivador rincón de Estonia sin duda dejará una impresión positiva duradera y perdurable en el tiempo en todos aquellos que puedan interactuar entre sus diversos laberintos y experiencia rica en cultura.

Maravillas arquitectónicas:

La arquitectura del casco antiguo de Tallin es una cautivadora mezcla de estilos medieval, gótica y barroca, que muestra un rico tapiz de historia. Los hitos destacados incluyen:

a. Castillo de Toompea: encaramado en la colina de Toompea, esta fortaleza del siglo XIII alberga el Parlamento de Estonia en la actualidad. Ofrece impresionantes vistas panorámicas de la ciudad y el mar Báltico.

b. Catedral de Alexander Nevsky: un símbolo de la ciudad, esta catedral ortodoxa rusa cuenta con llamativas cúpulas de cebolla e intrincados mosaicos, que reflejan la influencia del Imperio Ruso durante la historia de Tallin.

C. Iglesia de San Olaf: una vez que fue uno de los edificios más altos del mundo, esta obra maestra gótica cuenta con una plataforma de observación con impresionantes vistas de la ciudad.

d. Plaza del ayuntamiento: el corazón del casco antiguo de Tallin, esta plaza histórica exhibe coloridas casas de comerciantes y alberga eventos vibrantes durante todo el año.