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El hallazgo se produjo durante un operativo efectuado la mañana del lunes 24 de noviembre en el Terminal Islajacoop, orientado a revisar el funcionamiento contractual y la correcta aplicación de los recursos destinados a los servicios de transporte rural.
La fiscalización fue encabezada por el seremi de Transportes y Telecomunicaciones del Biobío, Patricio Fierro, y se desarrolló desde las 9:30 en el citado terminal.
El operativo se centró en los contratos que conectan localidades precordilleranas con Los Ángeles. En la oportunidad se controlaron los tres primeros servicios provenientes de Alto Biobío, cuya operación beneficia a residentes de Ralco, Pitril, Caiñicú, Malla-Malla, Trapa-Trapa y Butalelbún, entre otras comunidades cordilleranas.
Estos recorridos pueden alcanzar hasta 150 kilómetros y prolongarse por cuatro o cinco horas de viaje, con una tarifa de adulto que oscila entre los $2.770 y $3.140. Personas mayores, usuarios con discapacidad y escolares hasta siete años tienen pasaje liberado, mientras que los estudiantes pagan solo el 33% del valor.
De acuerdo con el Ministerio de Transportes y Telecomunicaciones (MTT), los CTR cumplen un rol esencial al garantizar traslados hacia centros de salud, establecimientos educacionales y servicios básicos. En la región operan 29 CTR y contratos de zonas aisladas, equivalentes a 70 servicios distribuidos en 17 comunas, financiados con un monto anual cercano a los $1.600 millones.
La revisión incluyó documentación de buses y conductores, además de una inspección visual de elementos de seguridad como neumáticos, cinturones, parabrisas y extintores. Según el MTT, los controles confirmaron que los servicios se estaban ejecutando conforme a los horarios y recorridos establecidos.
La documentación requerida —licencias, permisos de circulación y revisiones técnicas— se encontraba vigente, por lo que la inspección no derivó en citaciones al Juzgado de Policía Local.
Pese al balance positivo, se detectó un incumplimiento contractual que motivó la apertura de un procedimiento administrativo. La observación recayó sobre el uso de un bus inscrito para un servicio subsidiado, pero que habría operado de manera particular, con un itinerario distinto y por medio de la aplicación de tarifas fuera de lo estipulado en el CTR.
El seremi añadió que los antecedentes revisados arrojaron resultados favorables.
La autoridad recalcó que estos controles buscan fortalecer la seguridad de los usuarios, especialmente si se considera que el servicio hacia Alto Biobío es uno de los recorridos más extensos de la provincia, por lo que demanda recursos relevantes para su operación.
✔️ Servicios realizaron sus itinerarios conforme a horarios y recorridos establecidos.
✔️ Documentación de buses y conductores se encontraba vigente.
✔️ Inspección visual no derivó en citaciones al Juzgado de Policía Local.
❌ Se detectó uso indebido de un bus subsidiado para un servicio particular y aplicó tarifas y recorrido fuera del contrato CTR.
❌ Se abrió un procedimiento administrativo contra la empresa responsable.
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