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Durante la noche del 3 de marzo, vecinos de Mulchén se vieron afectados por la turbiedad en el suministro de agua potable, lo que motivó una serie de consultas a la empresa distribuidora Essbio. Frente a este imprevisto, la compañía tomó medidas inmediatas para garantizar la calidad del servicio y la seguridad de los usuarios.
Según lo informado por Essbio, se procedió de manera urgente a una revisión integral del sistema productivo de agua. En primer lugar, se realizaron lavados preventivos de las redes de distribución, con el objetivo de eliminar cualquier posible impureza en el agua. Además, se implementaron monitoreos detallados en cada fase del proceso de producción y distribución del vital elemento, desde la captación hasta su llegada a los hogares de la comuna.
Horas más tarde, la empresa confirmó que todos los parámetros de desinfección, así como los procesos operacionales, se mantenían dentro de los estándares establecidos por las autoridades sanitarias, asegurando que el agua es completamente segura para el consumo humano. A pesar de la turbiedad inicial, los análisis revelaron que la presencia de partículas en el agua era mínima e inocua, y que su concentración disminuía con el paso de las horas, por lo que no representa ningún peligro para la salud de los vecinos.
Hoy se continuaron llevando a cabo los lavados de las redes y se realizaron controles adicionales para asegurar la estabilidad del servicio. Essbio, en su último comunicado, aseguró a la comunidad que los procesos de purificación y control de calidad se están llevando a cabo.
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