Gremios agrícolas buscan que el trigo se sume a los cultivos de contrato

El presidente de la Asociación de Agricultores de Malleco, Sebastián Naveillán, afirmó que los gremios que componen la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA) han impulsado un modelo de contrato para el trigo, considerando las buenas experiencias en otros cultivos y la estabilidad que otorgaría a toda la cadena productiva, de manera de disminuir el cereal importado al país. 

De acuerdo a datos oficiales, Chile consume cerca de 2,4 millones de toneladas de trigo al año, de las cuales aproximadamente un 45% se satisface con la producción nacional que se siembre desde la región del Maule al sur, con una concentración mayor en La Araucanía. El resto se importa, en gran medida de Argentina.

Según Naveillán, la idea de la agricultura por contrato para el trigo "nace después de varias reuniones con el presidente de la Asociación de Molineros y conversando con la Sociedad Nacional de Agricultura hemos visto buenas experiencias en siembras de contrato, tanto en el raps como en la avena".

A su juicio, "es sumamente importante sentarnos con los molinos y sembrar lo que ellos necesitan, respetando lo que nos digan. La mejor forma es hacer siembras de contrato, de manera que las reglas estén establecidas, claras y sean conocidas por ambas partes y así tener un pago conocido".

"De esta forma, el agricultor puede proyectarse en la cosecha, con sus rotaciones y eso nos daría estabilidad en la planificación agrícola que realizamos todos los años", afirmó.

En el caso de la Comercializadora de Trigo (Cotrisa), el dirigente destacó su papel como poder de compra para la mediana y pequeña agricultura, "por lo que debería seguir en ese rol", aunque postuló la idea que podría "negociar volumen con los molinos y que así sea más atractivo para los molinos comprar volumen y no a pequeños agricultores por sí solos, que es un proceso más largo".

AGRICULTURA DE CONTRATO

Sobre las condiciones de seguridad en la Macrozona Sur, Sebastián Naveillán destacó que "los índices (de inseguridad) han bajado, aunque no a cero, por lo que hay un riesgo no menor", pero, a su juicio, están "las condiciones necesarias para poder hacer agricultura de contrato sí están".

"La experiencia con los contratos en el raps o la avena no son malos, sino que por el contrario, es buena y por ende, creemos que se puede lograr lo mismo con el trigo", aseguró.

El presidente de la Asociación de Agricultores de Malleco insistió en que "es importante conocer las condiciones detrás del negocio y que sean condiciones conocidas y claras para ambas partes".

Sobre esa base, según Naveillán, se tendrían las certezas para el modelo de contrato a la agricultura del trigo: "Sería fundamental para darle seguridad a este contrato y al mismo productor. En caso de que eventualmente se llegara a materializar, sería importante cumplir con estos contratos, con reglas claras y conocidas".

"Si se logra hacer una buena alianza entre productores y molinos, sin duda se podrá cumplir con las condiciones acordadas previamente. Obviamente la idea es que la importación de trigo en verano sea cada año más baja, para preferir el consumo de trigo nacional", proyectó.

Sebastián Naveillán abogó para que "la molienda entienda que debe preferir el producto nacional antes que el importado. Como agricultores, tenemos que tener el compromiso de sembrar trigos de buena calidad harinera, para que así la molienda también pueda salir adelante".