Angostura del Biobío fue el escenario para innovador taller de pesca deportiva sustentable

Un grupo de 12 habitantes de las localidades de San Ramón, Lo Nieve, Aguas Blancas y Los Junquillos participaron en un taller de pesca selectiva y sustentable para desarrollar actividades tanto deportivas como recreativas de la especialidad.

El taller fue organizado por el Complejo Biobío de Colbún a orillas del embalse de la Central Hidroeléctrica Angostura, ubicada en las comunas de Santa Bárbara y Quilaco.

La actividad constó de un módulo teórico en el Camping Trompelhueno de Quilaco y otro práctico a orillas del embalse.

El primero tuvo dos horas de duración, con una primera parte orientada al conocimiento de las especies nativas que forman parte del ecosistema local y al Plan de Seguimiento de la Fauna Íctica de la Central Angostura, incluyendo las medidas para prevenir la propagación del didymo. En la segunda parte se analizaron técnicas de captura y la Ley de Pesca.

El encargado de pesca selectiva, Christopher Fernández, quien dio cátedra del taller práctico, explicó que se entregó información específicamente sobre la Ley 20.256 del Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura (Sernapesca).

“Entregamos antecedentes de cómo las personas pueden interactuar con la pesca de una forma sustentable y desarrollar sus habilidades de una mejor forma, potenciando sus técnicas con base en la normativa vigente”, aseguró.

Asimismo, comentó que “se dio énfasis en la importancia de contar y portar el permiso de pesca otorgado por la autoridad, identificar los diferentes tipos de señuelos artificiales, y contar con equipo adecuado para hacer una captura eficiente y controlada”.

UN ENFOQUE SUSTENTABLE

En este taller de pesca los asistentes pudieron conocer las bases de la especialidad y diversas técnicas para ponerlas en práctica en competencias y, asimismo, por ocio admirando ríos, lagunas o el mar, pero sobre todo, con un enfoque sustentable, por lo que en una primera instancia se les entregó información para acercarlos a la fauna nativa y al concepto de ecosistema acuático-terrestre.

En cuanto a la finalidad del taller, la supervisora ambiental del Complejo Biobío de Colbún, Alejandra Saldivia, aseguró que “las especies que estamos enfocados en proteger y los objetivos que persigue la actividad de pesca selectiva son controlar a los depredadores de las especies nativas en ríos y en el embalse”.

Precisó que el control de depredadores es parte de los compromisos ambientales de la Central Angostura, pero la empresa no ha querido realizarlo sola, sino mediante un trabajo colaborativo con la comunidad, entregando información y potenciando el conocimiento de los participantes. En ese contexto es que a los asistentes se les enseñaron técnicas de pesca de orilla para la extracción de trucha café o marrón, y trucha arcoíris, siempre cumpliendo con las medidas administrativas que establece la ley.

RECEPCIÓN POSITIVA DE LA COMUNIDAD

En relación con lo aprendido durante la jornada, el presidente de la junta de vecinos de San Ramón, Guido Arteaga, puntualizó que el taller fue “interesante porque tenemos varios lugares donde desarrollar esta actividad y qué mejor que hacerlo informados. Valoramos el conocimiento y que sea sustentable, que podamos hacerlo por mucho tiempo más”.

Agregó que “nunca había utilizado el carrete profesional para pescar, siempre lo había hecho de forma artesanal, con un tarro y no con varilla. Aprendimos hartas cosas, la amplia variedad de especies que hay y los aspectos legales, lo que se puede y no se puede hacer”, comentó Renato Contreras, participante del sector Los Junquillos.

Para su parte, el operador de la Central Angostura de Colbún, César Carrasco, quien también fue alumno del taller, expresó: “Ha sido muy bueno, entretenido y satisfactorio. Aprendimos técnicas nuevas y complementamos a las que teníamos”. Añadió que aplicará los conocimientos en un club de pesca recreativa que integra con otros colegas.