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Profesionales llaman a cuidar las neuronas del intestino con una vida más sana

por Nicolás M.

Han pasado cerca de 20 años desde que se descubrió el lazo entre el intestino y el cerebro, no obstante, los expertos reconocen que aún falta por seguir aprendiendo.

sii, probióticos, intestino / Pixabay

Con el pasar de los años, el conocimiento en torno a los distintos órganos al interior del cuerpo humano se va expandiendo con miras a la solución de enfermedades recurrentes. Tal es el caso de las patologías que afectan al intestino de las personas y en los últimos años han ido en aumento de prevalencia e incidencia.

Sin ir muy lejos, durante 2014 un grupo de investigadores chilenos comprobó que ya existía una tendencia al aumento del número de pacientes con enfermedad inflamatoria intestinal (EII) al interior del territorio.

Lo relevante de este panorama es que la ciencia médica cataloga al intestino como el segundo cerebro, así lo explicó la Dra. Isabel Lagos, gastroenteróloga de Clínica Las Condes, en conversación con el diario.

¿POR QUÉ SE LE LLAMA EL SEGUNDO CEREBRO?

De acuerdo con la entrevistada, "el intestino tiene millones de neuronas, si bien son menos que el sistema nervioso central, estas comandan cómo se mueve el intestino manteniendo, además, una conexión directa con el sistema nervioso central, es decir, el cerebro (...) Aquí se presenta una comunicación bidireccional. Parte de lo que sucede en el intestino va a impactar en cómo funciona nuestro cerebro y por ese motivo se le denomina el segundo cerebro".

¿CÓMO INFLUYE LO QUE COMEMOS?

"Una de las formas en que se comunica el cerebro con el intestino es a través de las bacterias intestinales o microbiota intestinal, entonces la forma en que nosotros nos alimentamos impacta directamente la composición de estas bacterias. Por ejemplo, si consumimos muchos azúcares, alimentos con emulsionantes u otros aditivos químicos, estos van a cambiar la composición de las bacterias", explicó la entrevistada.

Asimismo, la profesional que cuando la microbiota está alterada se envían señales al cerebro, lo que genera ciertos efectos en el sistema nervioso central: "De hecho se ha visto que las personas que tienen alteración de la microbiota intestinal tienen más frecuentemente depresión y otras enfermedades del cerebro".

¿CUÁLES ENFERMEDADES PREDOMINAN EN CHILE?

Desde su experiencia, la Dra. Lagos comentó que existen enfermedades más presentes en la sociedad tales como la constipación crónica o el sobrecrecimiento bacteriano: "El sobrecrecimiento bacteriano es un aumento de las bacterias que hay en el intestino delgado, el cual puede impactar a otros órganos que están fuera del intestino".

"Por ejemplo en patologías como el síndrome intestino irritable, en que hay una alteración de cómo funciona el movimiento el intestino y las neuronas del intestino, los pacientes que tienen esta patología tienen más presencia de ansiedad, depresión u otros trastornos del ánimo, lo que puede afectar su estado anímico en forma crónica", detalló la experta en conversación con diario La Tribuna.

¿CÓMO SE ABORDA ESTE PROBLEMA?

Siguiendo con la conversación, la profesional señaló que cada una de estas enfermedades requieren de un enfoque multidisciplinario: "Muchas veces no basta con un fármaco, sino que hay que hacer cambios en el estilo de vida (...) En muchas de estas patologías puede ayudar a disminuir los síntomas hacer técnicas de meditación o mindfulness, que también modifican cómo nuestro sistema nervioso central se adapta al entorno".

AÚN FALTA POR CONOCER

A pesar de lo revelador que puede parecer el lazo entre el intestino y el cerebro humano, este hallazgo ya cumple cerca de dos décadas. Años que han transcurrido con nuevos avances, que se espera sigan dando que hablar.

"Esta conexión cerebro-intestino es relativamente nueva, tiene prácticamente 20 años desde que se conoce. La verdad es que recién estamos conociendo gran parte de las moléculas que interactúan, no es solamente el eje microbiota, sino que también hay un eje hormonal que comunica el intestino con el cerebro (...) Creo que todavía tenemos poco conocimiento, si tuviera que poner un número diría un 25 % del conocimiento y nos queda mucho por conocer", planteó la entrevistada.

Antes de cerrar, la profesional de Clínica Las Condes comentó: "Cuando los síntomas gastrointestinales tienen un impacto sobre la calidad de vida diaria, generan ansiedad, preocupación, nos dificultan salir de la casa o las interacciones sociales, es muy importante consultar. Muchas de estas patologías pueden ser similares y tienen síntomas inespecíficos, por lo tanto, uno requiere una evaluación correcta por un profesional de la salud, tanto para ver la historia clínica como para hacer un correcto examen físico, y abordar cuál de estas patologías se trata".

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