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De acuerdo con esos antecedentes, el líder venezolano había solicitado una amnistía total para él y sus familiares, el retiro de sanciones contra cerca de 100 funcionarios de su administración y el cierre de la investigación por crímenes de lesa humanidad en la Corte Penal Internacional. Además, buscaba que la vicepresidenta —no reconocida por Washington— Delcy Rodríguez asumiera un gobierno interino mientras se organizaban nuevas elecciones.
Tres de las fuentes indicaron que Maduro expresó disposición a dejar el país, pero condicionó esa salida a las garantías mencionadas. Sin embargo, la Casa Blanca rechazó la mayoría de sus exigencias durante una conversación que no se extendió más allá de los 15 minutos.
En este contexto, Trump habría fijado un plazo hasta el 28 de noviembre para que Maduro dejara el cargo. El incumplimiento derivó en la orden de cerrar el espacio aéreo venezolano, emitida al día siguiente, decisión que fue interpretada como una señal de endurecimiento en la postura del gobierno estadounidense.
Mientras se desconoce si existirá una nueva comunicación entre ambos mandatarios, el oficialismo venezolano salió a las calles de Caracas en rechazo al despliegue militar estadounidense en la región.
En paralelo, CNN informó que este lunes se desarrollaría una reunión clave en la Oficina Oval, donde participarían figuras de alto rango del gobierno estadounidense, entre ellos el secretario de Estado, Marco Rubio; el secretario de Defensa, Pete Hegseth; y el jefe del Estado Mayor Conjunto, Dan Caine. El encuentro ocurre en medio de advertencias y movimientos estratégicos que han encendido las alarmas en varios países de la región.
Trump ha evitado precisar si el cierre del espacio aéreo podría derivar en una intervención terrestre. En el marco de su ofensiva antidrogas, el Ejército de Estados Unidos ha llevado a cabo más de 20 operativos contra embarcaciones identificadas como narcolanchas, acciones que han dejado más de 80 fallecidos.
En una entrevista con CNN, el senador republicano Markwayne Mullin confirmó que Estados Unidos ofreció a Maduro la posibilidad de dejar Venezuela hacia Rusia u otra nación dispuesta a recibirlo. "Le dimos a Maduro una oportunidad de partir", afirmó, sosteniendo además que la población venezolana "quiere un nuevo líder".
Pese a la escalada verbal, Mullin aseguró que la administración Trump no tiene previsto un despliegue de tropas dentro de Venezuela, calificando las advertencias como medidas para proteger las costas estadounidenses y frenar el tráfico de drogas.
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