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La primera vuelta de las Elecciones de 2025 en Chile dejó en evidencia el alto costo de las campañas. Recientemente se confirmó que los postulantes a La Moneda que figuraron en la papeleta presidencial sumaron un total de $10.752 millones en créditos.
Según explicó ADN Radio, este dato se reveló luego de que los administradores electorales cumplieran el plazo inicial para presentar la documentación de ingresos y gastos. La información entregada es fundamental, ya que permite calcular cuánto dinero recuperará cada postulante del Servicio Electoral (Servel). Sin embargo, la brecha de financiamiento afectó a al menos dos figuras: Harold Mayne-Nicholls y Marco Enríquez-Ominami (MEO) no consiguieron los votos necesarios para solventar sus deudas crediticias.
Los datos oficiales de la campaña indican que los aportes totales superaron los $12.896 millones. La mayor porción de este monto provino de los créditos, que representaron el 83,4% de los recursos totales. En contraste, los aportes privados alcanzaron los $707,7 millones, y $1.436 millones fueron provistos por partidos políticos.
El mecanismo de reembolso del Servel está definido por ley, estableciendo un límite máximo de 0,04 Unidades de Fomento (UF) por cada sufragio, lo que se traduce en $1.585. La devolución se realiza según la votación conseguida y respeta este tope en UF.
Respecto a los préstamos individuales, se destaca que Evelyn Matthei y Jeannette Jara solicitaron las mayores sumas, con $2.160 millones y $1.760 millones, respectivamente. Aunque los préstamos se piden inicialmente bajo la expectativa de obtener un porcentaje de votos que los respalde, este supuesto no se cumplió para todos. Se estima que, si bien las cuentas de otros seis postulantes son aún confidenciales, sí podrían cubrir sus obligaciones.
El caso de Harold Mayne-Nicholls ilustra la dificultad para cubrir los pasivos. El expresidente de la ANFP logró 162.622 votos (el 1,26% del total). Al aplicar el tope de 0,04 UF por voto, su monto máximo de recuperación se establece cerca de 257 millones. No obstante, la suma de sus tres créditos reportados alcanzan aproximadamente 559 millones, dejando un déficit considerable.
De forma similar, Marcos Enríquez-Ominami (ME-O), quien obtuvo el 1,20% de los votos, tiene un límite de reembolso de 245 millones. Sin embargo, sus créditos solicitados suman 598 millones de pesos.
En cuanto a la fiscalización, el plazo para la entrega de la documentación contable por parte de los administradores electorales expiró el viernes, y dicha información debe ser entregada al Subdirector de Control de Gasto y Financiamiento del Servel el próximo martes 30 de diciembre .
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