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En los primeros meses de este 2023, ya han sido decomisados cerca de 20 kilos de drogas en Los Ángeles, ciudad que dentro de la provincia de Biobío, concentra la mayor cantidad de operativos, siendo las drogas de mayor incautación, el clorhidrato de cocaína, la cocaína base y la cannabis.

Las cifras son decidoras, si se considera que, de enero a la fecha, se han triplicado los decomisos, si se compara con lo ocurrido el año pasado, donde se requisó una menor cantidad de droga, en medio de una escalada de violencia, con homicidios y balaceras entre bandas rivales en distintos sectores de la ciudad.

En este contexto, las cifras de decomisos son un claro indicio de que la lucha contra el tráfico y venta de drogas sigue siendo un desafío.

En entrevista con diario La Tribuna, el subprefecto, Juan  Bravo Sandoval, jefe de la Brigada Antinarcóticos y contra el crimen organizado de la ciudad de Los Ángeles dijo que el tráfico de drogas sigue siendo un problema creciente en la provincia de Biobío: "A la misma fecha del año pasado, llevábamos poco menos de cinco kilos de las tres principales drogas. Estoy hablando de clorhidrato de cocaína, cocaína base y cannabis. Sin embargo, hoy día, a la misma fecha, tenemos un aumento de casi el 300% en la incautación, ya que al día de hoy, llevamos casi 20 kilos".

Sobre las sustancias decomisadas agregó que la principal droga incautada es la cocaína base, "así es que efectivamente sí, hemos tenido un aumento en la cantidad de kilos".

El subprefecto Bravo explicó que el aumento en la cantidad de drogas decomisadas se debe principalmente a la creciente demanda por consumo de drogas, especialmente entre los jóvenes estudiantes de octavo a cuarto medio,  citando los resultados del último Estudio Nacional de Drogas realizado por el Servicio Nacional para la Prevención y Rehabilitación del Consumo de Drogas y Alcohol ​Senda Previene: "En dicho estudio de Senda, se señala que la mayor cantidad de gente que consume en este momento corresponde a estudiantes de octavo a cuarto medio. O sea, son el segmento etario de más alto de consumo. Entonces, creo que, este aumento de droga se debe simplemente a que hay mayor demanda por consumo".

Al ser consultado por la proliferación de bandas o de grupos dedicados al microtráfico, el subprefecto Bravo expresó que este tipo de acciones se cometen  indistintamente en diferentes lugares: "No es que sea una ciudad equis, o que sea más atractiva o menos atractiva. Creo que se debe simplemente a la demanda de drogas por parte de los consumidores".

Además, afirmó que el impacto de las operaciones antidrogas ha sido positivo, aunque aún falta para erradicar completamente el problema en la provincia: "La percepción ha sido buena pero no es suficiente".

DE FORTIFICACIONES AL CONTROL DE LAS CALLES

El jefe antinarcóticos también se refirió al uso de fortificaciones en casas para el tráfico de drogas y llamó a la colaboración ciudadana en la lucha contra esta problemática.

Según el subprefecto, la investigación del tráfico de drogas conlleva muchos ámbitos y uno de ellos es conocer los lugares donde se está comercializando droga. Para ello, se han detectado casas o "fortalezas", así como cámaras o sistemas de vigilancia utilizados por las bandas para monitorear el movimiento en sus barrios.

Agregó que esta realidad conlleva a otros desafíos en las investigaciones, ya que los implicados en la venta de drogas no solo levantan fortalezas para blindar sus casas, sino que también "están utilizando bienes de uso público para instalar sistemas de vigilancia. Me refiero a que normalmente están utilizando los postes de la luz o cualquier otra instalación para ubicar cámaras, con la intención, en algunos casos, de eludir el accionar de la policía. Entonces, creo que eso hoy día es un gran desafío para para nuestra ciudad, a pesar que no es la única donde se ha visto esta forma de operar de los delincuentes y que tiene relación con el blindaje de sus de su domicilios".

El subprefecto indicó que hasta el momento sólo se han encontrado casas fortificadas en sectores urbanos, y no en zonas rurales.

En otro orden, subrayó que el trabajo policial no se puede hacer solo y llamó a la colaboración ciudadana para poder combatir eficazmente el tráfico de drogas. "Existen una serie de medios para poder hacerlo de manera anónima. Así que lo único que requerimos es que la comunidad también tome parte en este combate a las drogas y nos coopere cada uno de acuerdo a sus medios", afirmó.

HOMICIDIOS, BALACERAS Y ENFRENTAMIENTOS

A mediados de abril del año pasado fue capturado El Gallineta, uno de los cabecillas de una narco banda, quien habría contratado sicarios para ajustar cuentas con otras bandas, incidentes que terminaron en balaceras y en violentas acciones en el sector céntrico:

"El año pasado, bandas rivales, operaban en el sector suroriente de la ciudad y puntualmente una, que salió en todos los medios, que era la Banda del Gallineta. Esa banda fue intervenida y gran parte de su estructura fue desarmada y lo principal es que la cabeza y los actores principales se encuentran hoy día en prisión preventiva".

El subprefecto Bravo manifestó que: "La investigación se mantiene. Sin embargo, dentro de la ciudad, sí hay focos de tráfico y microtráfico no puntualmente relacionados con esa banda".

A NIVEL PROVINCIAL

Actualmente la provincia de Biobío cuenta con tres grupos de microtráfico, ubicados en Mulchén, Cabrero y Los Ángeles, "cada uno con la responsabilidad de abarcar todo lo relacionado con el narcomenudeo en su jurisdicción. Esta estrategia es a nivel nacional y cuenta con un mando desde Santiago, aunque los mandos regionales y la mesa operativa asesora están constantemente evaluando los avances y desafíos que se presentan" explicó el jefe de la unidad especializada de la PDI.