Sentencian a 10 años de presidio a sujeto que violó a su madre de 80 años en Los Ángeles

Este lunes 16 de enero se dio a conocer la sentencia dictada por el Tribunal Oral en lo Penal de Los Ángeles contra un hombre identificado con las iniciales J.D.V.O., de 56 años, en calidad de autor de los delitos consumados de violación y desacato, en contexto de violencia intrafamiliar (VIF).

Los hechos ocurrieron el pasado 5 de julio de 2020, donde a pesar de mantener una orden de alejamiento en su contra, un hombre llegó hasta el sector rural de Chacayal sur, en la comuna, donde vivía su madre, una mujer en ese entonces de 80 años, que padece Parkinson, para violarla y posteriormente huir a esconderse en un pozo profundo, desde el cual tuvo que ser rescatado.

Según se informó, el juicio se extendió por más de cuatro días, contando además con la declaración de 21 testigos.

La Fiscalía, en un principio, solicitó para el acusado una condena que supera los 20 años de presidio efectivo, agregando además que el acusado actuó con alevosía, ya que su madre no tenía cómo defenderse del ataque porque padece Parkinson.

En una primera resolución unánime, el tribunal integrado por las magistradas Ingrid Quezada Valdebenito (presidenta), Marisol Panes Viveros y Andrea Rodríguez Ferrada (redactora), tras la deliberación de rigor, dio por establecido tanto la ocurrencia de los delitos como la participación culpable del acusado en los hechos.

“La conclusión anterior se basa en que la prueba rendida por el Ministerio Público, consistente en prueba testimonial, pericial, documental y otros medios de prueba, tuvo la entidad suficiente como para adquirir la convicción, más allá de toda duda razonable, de que realmente el acusado cometió los hechos punibles antes descritos y que en ellos tuvo una participación culpable y penada por la ley”, consigna el acta de deliberación.

No obstante, la lectura de sentencia estableció una pena de 10 años de presidio efectivo por el delito de violación, además de 541 días por el delito de desacato, ya que mantenía una orden de alejamiento vigente al momento de la comisión del crimen.