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Sus amigos y cofrades lo recuerdan con especial cariño y lo describen como una persona muy activa, sobre todo en redes sociales, donde daba a conocer las emergencias locales.
Espinoza comenta que, como institución, se encuentran muy acongojados por la partida del integrante, a quien recuerda como una persona muy conciliadora.
"Trataba de contrarrestar cuando muchas veces se suscitan algunas diferencias entre los bomberos. Él siempre estaba llano a poder solucionar de alguna forma más tranquila, más conciliadora", manifestó.
Agregó sentirse orgulloso de haber compartido con él, no tanto como comandante sino como voluntario. En ese sentido, indicó que los cargos no quitan el mérito de formar parte de ese voluntariado.
Walter Espinoza recordó que en muchas emergencias él era el encargado de transmitir a la comunidad las informaciones pertinentes y, además, ayudaba con el registro fotográfico de los diferentes informes periciales que posteriormente debían enviar a la Fiscalía en cualquier tipo de emergencia.
"Estamos hablando de un excelente bombero, como muchos otros del cuerpo y de nuestra institución", enfatizó.
Quitim Silva era casado y, en su partida, deja una hija de apenas ocho años. El comandante Walter Espinoza enfatizó que era muy dedicado a su familia.
"En los tiempos libres lo veíamos muy cercano a su hija, paseando en el cuartel o en el frontis. De hecho, se excusaba de no poder salir a las emergencias cuando estaba cerca de la unidad, precisamente por los cuidados de su hija", recordó el comandante.
Respecto de su familia, detalló que es muy numerosa y que uno de sus hermanos también se desempeña como voluntario del Cuerpo de Bomberos. En alguna oportunidad, ocupó el cargo de director de compañía.
Quitim Silva Cifuentes fue diagnosticado con un cáncer, que lo mantuvo aquejado durante algún tiempo. Estuvo en tratamiento, pero lamentablemente su cuerpo no resistió esta enfermedad.
Pese a ello, su ánimo no decayó y hasta el último momento manifestó sus deseos de recuperarse y regresar para asistir al cuartel. Ello, señaló Espinoza, pese a saber que estaba en una condición delicada.
"Probablemente él sabía que no iba a asistir a emergencias, pero para que la gente entienda, el cuartel de bomberos es nuestra casa. Es como llegar a la propia casa, porque aquí nosotros si queremos cocinar algo, hacemos vida de cofrades, con conversaciones, reuniones y academias. Entonces, él echaba de menos eso también", recordó el jefe institucional cabrerino.
El fallecimiento del voluntario de Monte Águila, Quitim Silva, coincide con un nuevo aniversario de la compañía, a la que prestó servicio durante 31 años.
Por eso, se acordó realizar un pequeño acto en conmemoración en memoria del fallecido voluntario.
"Lamentablemente, este sábado 15 de noviembre la compañía cumple 57 años, y él quería estar presente acá para algunas actividades", mencionó con nostalgia el comandante.
Quitim Silva está siendo velado en el cuartel de la Tercera Compañía de Monte Águila, como lo solicitó en vida.
La noche del miércoles se dispuso una guardia de honor desde las 20:00 horas, la que continuará este viernes desde las 14:00 y hasta las 19:00 horas.
Luego de aquello, comenzará la tradicional ceremonia fúnebre en la Plaza de Armas de Monte Águila, para luego ser sepultado con todos los honores reglamentarios en el cementerio de esa localidad.
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