Productores de frutas de la provincia de Biobío podrán exportar productos orgánicos a Holanda

Tras un largo trabajo colaborativo entre los organismos sanitarios, de Chile y Países Bajos para poder interconectar sus sistemas y comenzar con la operación paperless, conocida también por sin papeles o certificados fitosanitarios para el intercambio comercial de productos de origen vegetal.

Así lo anunció el director nacional del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG), Horacio Bórquez, quien explicó que desde hace ya 8 años se trabaja en estrecho contacto con representantes del Netherlands Food and Consumer Product Safety Authority (NVWA).

Para avanzar en materias relacionadas al eCert, en las cuales Holanda es uno de los líderes a nivel mundial y del cual hemos aprendido mucho. De hecho, fue en el año 2012 cuando empezamos a trabajar en el intercambio de certificados fitosanitarios y zoosanitarios a través de la Plataforma CMS, gracias a la fluida relación de cooperación que mantenemos con ellos, lo que nos sirvió para cumplir con exigencias de mercados como China y la Unión Económica Euroasiática.

En agosto de 2019, el SAG y NVWA firmaron un plan de trabajo bilateral para llevar el intercambio de datos un paso más allá, buscando alcanzar la certificación electrónica sin papeles para certificados fitosanitarios, lo que tras un año de ajustes técnicos para lograr una adecuada conexión ya está funcionando entre ambos países.

Este logro, sumado al paperless alcanzado durante este año con la Unión Europea, Estados Unidos, Colombia, Argentina y Perú para productos vegetales, sitúa a Chile en una posición de privilegio en el mundo respecto al desarrollo de la certificación sanitaria electrónica.

Cabe tener en cuenta que entre los productos más exportados desde nuestro país a Holanda durante la temporada 2019-2020 están las paltas, los arándanos, las cerezas y las manzanas, siendo el principal puerto de ingreso a Europa el terminal de Rotterdam.

Al respecto, el director regional del SAG de Biobío, Iván Ramírez Delpín, indicó que durante el año 2020, el SAG, a través de nuestra oficina, generamos 756 exportaciones desde los puertos de la región con destino a Holanda, destacando los envíos de arándanos y manzanas frescas, bulbos de lilium con y sin raíz y bulbos de tulipán.

PROVINCIA DE BIOBÍO

Por lo mismo uno de los principales productos frutícolas exportados desde el territorio en los primeros cuatro meses del año fueron los arándanos frescos, seguidos por los arándanos congelados y las cerezas.

Hay que señalar que de todas estas frutas se totalizan en más 70 millones de dólares, lo que equivale a un 74% del total de las exportaciones de fruta fresca a nivel nacional.

Es por esto que el programa territorial integrado por PTI berries Biobío, el cual está compuesto por 87 productores convencionales y orgánicos de la zona, los cuales vienen trabajando de forma mancomunada desde hace más de cuatro años.

El presidente de la sociedad agrícola en Biobío, José Miguel Stegmeier, comentó que efectivamente el haber conseguido el visto bueno de Holanda, de que mediante el acuerdo operativo denominado System Approach, se deje de fumigar en Ñuble y Biobío con bromuro de metilo para combatir la lobesia botrana en arándanos, es una muy buena noticia para los agricultores.

Stegmeier agregó que esta nueva medida es, por un trabajo conjunto del SAG con los productores, logramos controlar la lobesia en nuestra zona, lo que permitió volver a exportar sin fumigaciones y así, además de bajar costos, mejorar las condiciones de la fruta y permitir recuperar los mercados para los arándanos orgánicos.

El representante del gremio en La zona comentó que queremos que sea el principal mercado para nuestros arándanos frescos y orgánicos, por lo que de todas maneras significa un beneficio para nuestros exportadores, sobre todo en momentos en que la competencia, sobre todo la del Perú, es cada vez más intensa.

Sabemos además que la pandemia del coronavirus, por todos los resguardos sanitarios que se deben tomar, ha generado mayores costos para poder realizar las labores en los huertos con la seguridad necesaria. Este costo en algo se compensa al evitar esas fumigaciones con bromuro y también al poder vender una fruta de mayor valor, concluyó el presidente de la Socabio.