
La propuesta del Ejecutivo modifica el decreto ley N° 3.500, que establece el Sistema de Pensiones, para incorporar una nueva modalidad que permite que todo afiliado que sea calificado como inválido total y que sufra una enfermedad terminal, tenga derecho a percibir una pensión como renta temporal, calculada para un periodo de dos años, y que será pagada por la AFP con cargo al saldo de la cuenta de capitalización individual, una vez reservado el capital necesario para pagar las pensiones de sobrevivencia y la cuota mortuoria, cuando corresponda.
Asimismo, aquellos afiliados y beneficiarios pensionados por vejez, vejez anticipada, invalidez total o sobrevivencia y que presenten una condición de enfermo terminal, tendrán derecho a un recálculo de su pensión.
Para estos efectos, se entenderá por enfermo terminal a toda persona con una enfermedad o condición patológica grave que haya sido diagnosticada, de carácter progresivo e irreversible, sin tratamiento específico curativo o que permita modificar su sobrevida, o bien cuando los recursos terapéuticos utilizados han dejado de ser eficaces, y, en ambos casos, con una expectativa de vida inferior a 12 meses, consignó Meganoticias.