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La Tribuna

Autoridad sanitaria ha fiscalizado más de 30 mil juguetes antes de Navidad

por Alejandra Sánchez

Los principales requisitos que se vigilan son, etiquetado obligatorio para todos los juguetes y advertencias de seguridad.

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En lo que va del año se han efectuado 165 fiscalizaciones en materia de venta de juguetes por parte de la autoridad sanitaria en la región, de las cuales 59 se han desarrollado en la provincia de Biobío, registrando sólo observaciones por parte de los fiscalizadores, pero sin tener que cursar sumarios al respecto.

En el marco del cumplimiento del Decreto N° 114, reglamento sobre la seguridad de juguetes, la unidad de gestión ambiental de la Seremi de Salud de la región del Biobío ha llevado a cabo todo un programa de vigilancia y fiscalización en la venta de estos productos, acción que se ve intensificada en fechas claves del año, como día del niño, Halloween (disfraces), pero por sobre todo, los días previos a Navidad.

El programa anual de fiscalización y vigilancia permite generar alertas para el retiro masivo de juguetes cuando éstos presentan riesgos para la seguridad y salud de la población infantil.

Los principales requisitos que se vigilan son, etiquetado obligatorio para todos los juguetes, advertencias de seguridad en juguetes destinados a niños menores de 3 años y juguetes inflamables. Asimismo, se piden requisitos de seguridad en juguetes eléctricos, científicos o juguetes específicos.

De este modo, sobre aquellos en los que se constate estén provocando daño o que tengan un incumplimiento en los requisitos químicos regulados en la normativa vigente, se instruye, toda vez que se requiera, el retiro a nivel nacional del producto identificado como riesgoso. Dichas alertas son notificadas al Minsal.  Lo que este año no se ha registrado en esta zona.

FISCALIZACIÓN EN LA PROVINCIA DE BIOBÍO

En la provincia, durante este año se han efectuado alrededor de 60 fiscalizaciones tanto a empresas del retail, supermercados, ferias y negocios menores, inspeccionándose o revisándose, y solo previo a Navidad, cerca de 30 mil unidades de juguetes, los cuales principalmente se encuentran en las salas de ventas, pero también se puede revisar el stock que las empresas tienen en sus bodegas de manera aleatoria.

Al respecto, el encargado de la Unidad de Gestión Ambiental de la Delegación Provincial Biobío de la Seremi de Salud, Juan Yévenes Echeverría, sostuvo que durante este año se han hecho observaciones especialmente por algunas omisiones en el rotulado de los juguetes, ante lo cual las empresas han hecho las correcciones correspondientes en el etiquetado, por lo que no se han cursado sumarios sanitarios.

RECOMENDACIONES 

A ello, el delegado, destacó las recomendaciones que se debe tener en cuenta, y el proceso de fiscalización sirve, además, para establecer recomendaciones a los padres al momento de adquirir un juguete.

Dichas recomendaciones dicen relación con:

 

-Comprar en lugares establecidos.

 

-Fijarse en que la etiqueta esté en idioma español y que contenga el nombre del juguete, país de origen, edad recomendada, instrucciones de armado y uso.

 

-Tener precauciones especiales para niños menores de 3 años. Para ellos los juguetes no deberían contener objetos pequeños como monedas, pilas botón, magnetos y otros, de dimensiones menores a 5 centímetros, pues pueden causar asfixia.

 

-Fijarse en la etiqueta que no presente las siguientes frases de advertencia: ¡Advertencia! No apropiado para niños menores de 3 años. Contiene partes pequeñas.

 

-Elegir un juguete que sea adecuado para la edad del niño o niña. Observar si el juguete presenta zonas angulosas, puntiagudas o superficies rugosas que pudiesen causar daño.

 

-Leer los instructivos y precauciones de uso del juguete, al momento de comprar, asegurarse que los juguetes destinados para niños y niñas mayores, no se encuentren al alcance de los más pequeños.

 

-Revisar continuamente si los juguetes están rotos o si pueden perder piezas que signifiquen un riesgo, no adquirir ni permitir el uso de un juguete cuya pintura se desprenda con facilidad.

-No permitir que los niños pequeños jueguen con globos desinflados o imanes, pues pueden generar daño a su salud por ingesta y asfixia.

 

-Eliminar las baterías y pilas agotadas de los juguetes, ya que pueden desprender líquidos y eventualmente dañar la piel o los ojos.

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