Autoridades comenzaron programa de fiscalización veraniega a piscinas y camping

Durante la tarde del viernes, el seremi de Salud del Bío Bío, Mauricio Careaga, junto a la delegada provincial de la institución, Angélica González, y un grupo de profesionales especialistas, iniciaron el programa de fiscalización de piscinas y camping en temporada estival, en la provincia de Bío Bío.

La inspección tenía como objetivo detectar irregularidades o incumplimientos a la normativa relativa al tema, específicamente, el Decreto Supremo 202 del 2002 sobre “Reglamento de los servicios de agua”, el Decreto Supremo 235 sobre “Reglamento general de alcantarillados particulares”, y el Decreto Supremo 594 sobre “Condiciones ambientales y sanitarias básicas en los lugares de trabajo”. 

Al respecto, Careaga describió los aspectos concretos a fiscalizar en piscinas, diciendo que “tenemos que asegurar el cumplimiento a la ley de los servicios que prestan estos operadores del rubro recreacional, revisando en las piscinas el cloro libre, la recirculación de las aguas, existencia de cierres perimetrales, la presencia de duchas en las entradas, que haya baños, que se cuente con agua potable y la presencia de un salvavidas”.

Agregó, que “un factor prioritario para nosotros es la medición del agua. Se le mide la acidez, el cloro disponible -que debe ir de en un rango de 0.5 a 1.5-, ya que mucho cloro provoca quemaduras o alergias bastante graves. Con poco cloro dejamos a la población expuesta a infecciones o bacterias”.

Con respecto a los servicios de camping, el seremi sostuvo que “hay que ver cómo se controla la basura, el tratamiento de los riles, que se cuente con agua potable, la presencia de un plan de fumigación y desratización. Es decir, todas las condiciones higiénicas mínimas para preservar la salud de las personas”. 

Durante la jornada se alcanzaron a revisar sólo piscinas; sin embargo, el programa continuará desarrollándose durante todo el periodo estival en la provincia de Bío Bío.

RESULTADOS DE LA FISCALIZACIÓN

La inspección alcanzó a fiscalizar la piscina municipal de Los Ángeles y otra privada, encontrándose en ambas sólo observaciones menores. Por ello, no fue necesario iniciar sumarios sanitarios.

Durante esta semana se continuará con el programa trazado para el mes de enero.

HISTORIAL 2015

Durante el 2015, la autoridad sanitaria realizó un total de 218 fiscalizaciones a campings y piscinas en toda la provincia de Bío Bío.

En dicho periodo se ejecutaron 25 sumarios sanitarios por la presencia de faltas, tales como no contar con autorización sanitaria o aguas no conformes a la normativa en piscinas.

En el desglose de la cifra, siete piscinas fueron sumariadas por la autoridad sanitaria, mientras que 18 campings cayeron también en esta misma categoría.

 

SANCIONES

Los operadores de servicios de camping o piscinas arriesgan sanciones que van desde la amonestación verbal hasta el pago de mil UTM, por no respetar la normativa relativa a la materia. En algunos casos justificados también pueden ser clausurados.

“El Código Sanitario nos da la facultad. Si algún recinto no cumple con la línea base, podemos prohibir su funcionamiento mientras mejoran las deficiencias. Y si las faltas son muy graves, podemos clausurarlas”, concluyó el seremi de Salud.

DENUNCIAS CIUDADANAS

Las autoridades de salud volvieron a reiterar el papel fundamental de la ciudadanía en materia de fiscalización, llamando a los turistas o usuarios de piscinas y camping a entablar sus quejas cuando encuentren alguna irregularidad.

Fue así como la delegada provincial de la seremi de Salud, Angélica González, señaló que “las denuncias se pueden gestionar en la oficina de la entidad ubicada en Ricardo Vicuña 341, o en la Oficina Información, Reclamos y Sugerencias (OIRS)”.

Elementos a considerar en camping y piscinas:

1)      Presencia de baños para público y personal del recinto.

2)      Que se cuente con agua potable.

3)      Presencia de señalética de seguridad.

4)      Cierre perimetral de piscinas.

5)      Presencia de salvavidas en piscinas.

6)      Existencia de enfermería y equipamiento.

7)      Personal calificado en primeros auxilios.

8)      Existencia de equipamientos de salvataje en zonas de circulación de bañistas.