"Me he superado como mujer"

Pamela Lagos es una joven trabajadora del sector de la Vega de Los Ángeles.

Hace un año, en el sector de la Vega de Los Ángeles se conformó un grupo solidario liderado por Pamela, que sueña cambiar la lluvia, el frío y el calor por un local establecido.

“Soy una mujer criada en la Vega, sólo me faltó nacer aquí”, comenta entre risas Pamela Lagos. De hecho, no duda en contar que su mamá la ponía en una caja platanera, la subía al triciclo y así recorría todo el sector. Para ella, este típico lugar se transformó en su hogar. Aquí creció y se enamoró, hace una década, de su marido.

Hasta hace pocos años trabajó en el puesto de sus padres, luego se independizó y puso su propio espacio de frutas y verduras. Dependiendo de la estación, son los productos que tiene para ofrecer. Hoy es el tomate, mañana el limón o la lechuga. “Gracias a Dios, me va bien. Mi clientela sabe dónde estoy”, dice.

Por su personalidad, y porque sabe lo que quiere, Pamela se convirtió en la presidenta del Banco Comunal (BC) “Renacer” de Los Ángeles. “Somos un grupo unido, con altos y bajos, pero bien. Para la mayoría, Fondo Esperanza nos ha ayudado mucho. Por ejemplo, algunos comenzaron con nada y hoy tienen sus puestos ¡Somos de empuje y seguimos los valientes!”, asevera.

SU RELACIÓN CON FONDO ESPERANZA

Ella supo de la organización cuando una asesora le dejó un folleto con la información. “Más que la plata, nos interesó la capacitación, porque no tenemos tiempo de asistir a clases todos los días, así que esto nos acomodó y ¡pucha que hemos aprendido!”, explica. Tanto para ella como para los demás integrantes del BC, en las sesiones de educación les han entregado las herramientas necesarias para administrar sus microemprendimientos.

“Como personas de la calle, nos ha servido estar en la institución. Antes veía a mis compañeros, pero nunca los saludaba, ahora se formaron lazos bonitos. No es sólo dinero, es un grupo de amistad”, indica. A lo que agrega: “Mi experiencia ha sido buena y bonita. Me he superado como mujer”.

Pamela afirma que es un tanto mañosa, ya que le gusta que todo marche correctamente y, como emprendedora, le gusta llegar hasta el final y jugársela. Por lo mismo, anhela instalar un negocio en su casa. “Quiero dejar de pensar que debo poner nylon cuando está lloviendo. Es muy sacrificado trabajar en la calle”, finaliza.