Por: Alejandra Sànchez Ocampo.
Como todo en la vida, para obtener todas las cosas buenas que conlleva ser dueño de un reconocido y típico restaurante, se necesita trabajar duro y sacrificarse. Y de eso sabe muy bien don Juan Venegas Videla, quien a sus 63 años ha tenido una vida de mucho esfuerzo para lograr mantener su negocio, el que es atendido por él, y que este sea uno de los más visitados por los angelinos durante 35 años.
¿Cuándo surgió la idea de dedicarse al rubro gastronómico?
En realidad, me arriesgue a esto, mi mamá tenía un local comercial de fantasía y zapatería, completamente distinto a esto, en el mercado que estaba en calle Almagro, y cuando este se quemó, nos trasladamos a este sector, aquí la municipalidad nos pasó un terreno para poner algo provisorio. Y comenzamos con este negocio.
¿Cómo comenzaron?
Esto comenzó el año 79, la idea surge, en realidad cuando nos cambiamos del otro local, mi mamá tenía su negocio en otro rubro, y ahí nos juntamos he hicimos una sociedad los dos, pensando que nos podía ir mejor, y la verdad es que nos fue mejor, y así hemos ido creciendo, son 3 locales juntos los que tenemos.
¿Cuántas personas visitan diariamente su local?
Entre 80 y 120 personas se atienden por día, tenemos un variado menú, que se basa en comidas típicas de la zona, mariscos, cazuela, porotos, guatitas, caldillos, entre otros, tenemos más o menos unos 12 ó 14 platos.
En relación a su clientela, ¿Aún mantiene la misma de hace 35 años?
Sí, hay personas que hace 25 a 30 años vienen a mi negocio, y son ellos mismos quienes traen a los hijos, nietos, amigos, bastante gente viene a visitarnos.
¿Qué hace para mantener una fiel clientela y que su local este siempre lleno?
Lo primero es tener cosas de buena calidad, no abarato costos en eso, si es una aceite, tiene que ser el mejor, todo bueno y fresco, lo principal es eso, y esa es la razón porque la gente viene con confianza y se sirven cosas que en realidad saben que van a degustar algo rico, que es bueno, que nunca se van a enfermar y van a comer cosas de calidad.
Desde que comenzó con su restaurante ¿Usted siempre se ha dedicado a atender a su clientela?
Aunque acá trabajamos 11 personas, incluyendo a mi madre y mis hijos, yo estoy acá atendiendo desde siempre. Estamos preocupados de que la gente se sienta grata y cómoda, y que degusten algo rico, esa es la razón por la que uno está preocupado de su negocio, y también a la gente le gusta que uno la atienda, porque se sienten mejor por el hecho de que uno está preocupado de sus mesas.
¿Qué satisfacciones y logros le ha traído el poder tener su propio restaurante?
Yo provengo de familia modesta, que con esfuerzo se ha ido logrando cosas, hemos ido haciendo cosas buenas y vivimos tranquilos, no pretendo tener plata, solo pretendo tener un buen pasar, y que es lo que en estos momentos estamos logrando.
¿Cuáles son las proyecciones que tiene en un mediano y largo plazo?
Nunca me proyecto, las cosas se van dando como se van dando, no me fijo una meta, sino que si algo se puede lograr, se logra, y si no, bueno mala suerte.
¿Cómo podría definir su trabajo?
Yo siempre le doy consejos a todo el mundo, relativo en lo que hace y trabaja, si le gusta lo que hace lo va a tratar de esforzarse en hacerlo bien.
Para mí esto ha sido poder realizarme como persona y como hombre, porque la persona cuando viene se siente conforme, hay personas que vienen una vez al año.