Tras aumento de caudal del Biobío: Pronostican apertura de compuertas en Central Angostura

Producto de las precipitaciones que se pronostican para este fin de semana, la empresa Colbún dio a conocer parte de las acciones realizadas hasta el momento, tanto en el embalse Angostura, como en las centrales Rucue y Quilleco

En el caso de la Central Angostura, ubicado en la cuenca del río Biobío, es importante señalar que se trata de un embalse de pasada, lo que quiere decir que el caudal que ingresa al embalse es el mismo que se evacúa en todo momento.

Debido a lo anterior, cada vez que el caudal del río Biobío supera los 700 metros cúbicos por segundo, valor que la Central Angostura puede canalizar a través de sus tres turbinas, el agua remanente pasa a través de las compuertas del embalse y continúa por el río.

Es así como durante la madrugada de este jueves 17 de agosto, el Embalse Angostura abrió compuertas debido a que el caudal natural del río superó los 700 metros cúbicos. A partir de ese momento las compuertas se han cerrado y abierto en varias oportunidades, conforme ha ido cambiando el caudal natural del río Biobío y su afluente, el Huequecura. Estos cambios de operación han sido informados oportunamente a las autoridades locales y regionales, de acuerdo con un protocolo de comunicación vigente, dado que es normal que el Embalse Angostura abra compuertas varias veces en el año.

Según los pronósticos oficiales de precipitaciones para el fin de semana, se espera que el Embalse Angostura vuelva a abrir compuertas en las próximas horas, en un volumen y tiempo que estará sujeto a la evolución del caudal de los ríos afluentes.

RUCUE Y QUILLECO

En tanto, en el caso de la cuenca del Río Laja (Región del Biobío), Colbún tiene dos centrales hidroeléctricas de pasada: Rucúe y Quilleco. Éstas no tienen embalses ni infraestructura que regule la entrega de agua, por lo que todo el caudal que ingresa por los canales para la generación de energía eléctrica es devuelto en las mismas condiciones y volúmenes al río Laja. Hasta ahora, ambas centrales están operando normalmente, según el volumen de agua disponible en el río Laja.