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El sistema frontal que afecta a gran parte del país no solo ha traído intensas precipitaciones, sino también vientos de gran intensidad, especialmente entre las regiones de Coquimbo y O’Higgins.
Según la Dirección Meteorológica de Chile, este escenario se mantendrá a lo largo de la jornada y hasta inicios de la próxima semana, generando preocupación entre apoderados y comunidades escolares respecto a la continuidad de las clases.
Ante las consultas sobre posibles suspensiones de actividades escolares, el ministro de Educación, Nicolás Cataldo, fue enfático en descartar una medida generalizada.
En conversación con el diario La Tercera, sostuvo que "cualquier decisión de suspensión de clases la vamos a tomar cuando las cosas ocurran, no antes".
Cataldo aclaró que el monitoreo de la situación es constante, y que solo se procederá a suspender clases si así lo determinan las autoridades responsables del manejo de emergencias. "A menos que sea absolutamente necesario y la autoridad vinculada a las materias de seguridad en el contexto de emergencia, así lo indique, las clases no van a ser suspendidas. No podemos perder ni un día de clase", recalcó.
El titular del Mineduc subrayó que las decisiones serán evaluadas en conjunto con las autoridades pertinentes.
De esta manera, la postura del Gobierno apunta a mantener la continuidad educativa, evitando medidas anticipadas que puedan afectar el calendario escolar, salvo que las condiciones climáticas representen un riesgo inminente para estudiantes y personal docente.
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